En las cocinas de MasterChef Celebrity 5 no falta el buen humor, algo de música y por supuesto las ganas de aprender de los aspirantes. Ainhoa Arteta ha repetido en varias ocasiones en el talent que se enfrenta a este reto como homenaje a su madre, a la que recuerda con emoción apenas contenida cuando tiene que elaborar una nueva receta. Son sus trucos y la buena mano que tenía las que la guían e incluso se anima a replicar los platos que le enseñó, como unas suculentas croquetas que hicieron las delicias de los jueces. La soprano ha reiterado su intención de seguir mejorando y para ello cuenta con un apoyo inmejorable: su hija Sarah.
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En una de las imágenes que ha compartido, Ainhoa remueve un ingrediente en una cazuela con su hija, de 19 años, junto a ella. “La verdadera disciplina no se impone. Solo puede venir del interior de nosotros mismos. Mi hija madruga conmigo para cocinar, para alcanzar la excelencia, eso sí, nunca sin dejar de divertirnos” escribe la artista de ópera. En la foto las dos, mano a mano, prueban nuevas combinaciones de alimentos detrás de las cámaras, algo que suelen hacer los aspirantes del reality -reciben algunas clases de cocina, pero es habitual que también por su cuenta practiquen lo aprendido-. Compagina el tiempo que pasa en familia (el pasado mes de junio celebró su primer aniversario de boda con Matías Urrea) con esta aventura televisiva y los ensayos de su nuevo proyecto en el Teatro de la Zarzuela. ¡Una artista todoterreno!
Con el recuerdo de su madre en el corazón
La artista entró en las cocinas asegurando que no es una experta chef, pero que con tenacidad y esfuerzo pretende alcanzar un nuevo nivel. En las entregas que se han emitido se ha podido comprobar que tiene mucho carácter y que no duda en defender su postura cuando hay discrepancias. Ha mostrado además su lado más sensible, recordando a su “maestra”. “Esta es la última receta que me dejó mi madre. Son croquetas a la Esther. Están hechas con lo último que escribió ella. Estoy emocionada, lo siento” aseguró, limpiándose las lágrimas tras una de las pruebas de eliminación.
Ainhoa Arteta posa con su hija Sarah
Ainhoa Arteta aspira a hacerse con el premio en un talent que de nuevo pone al límite a los concursantes. Las pruebas de equipo y los retos individuales suponen un auténtico desafío para un grupo que en esta quinta edición está compuesto por divertidos rostros conocidos como Raquel Sánchez Silva, Perico Delgado o la Terremoto de Alcorcón. Todos van destapando sus fortalezas, pero también han demostrado las debilidades que tienen que pulir. El espacio les ayudará a llegar al pódium, aunque solo puede haber un ganador. ¿Tienes ya tu favorito?