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Después de que Pepe Rodríguez reabriera por un día su restaurante, El Bohío, llegaba el gran momento de escoger el tercer concursante que pasaría a la gran final de Masterchef. Ana y Andy habían conseguido ya su plaza, la primera como ganadora de la semana pasada y él como vencedor de la primera prueba eliminatoria de la noche, en la que los participantes tuvieron que seguir las indicaciones de Martín Berasategui para hacer una magnífica ensalada de bogavante. Finalmente y tras el reto en el local del chef manchego, Ivan se hacía con el tercer puesto para disputarse la final de la octava edición de Masterchef, por lo que Luna y Alberto se quedaban fuera en el último programa.
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Luna se convertía en la primera eliminada de la noche por su manera "caótica" de cocinar, según los jueces del 'talent', por preparar una crema de setas muy buena pero un postre muy deficiente. "Eres un verso libre. Vas a cocinar con tu estilo y eso es muy bonito, aprovéchalo", le decía Pepe Rodríguez durante las valoraciones, ya que la canaria ha conseguido ganarse los corazones de los jueces con su alegría y espontaneidad.
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Tras esta primera eliminación, Samantha Vallejo-Nágera, Jordi Cruz y Pepe Rodríguez se dirigían a Alberto, que se convertía en el siguiente expulsado. De esta manera, la única pareja de esta edición se quedaba a las puertas de la gran final, pero se lleva otro importante premio: "Lo más bonito que he conocido yo en Masterchef es Alberto, en mi vida tiene un hueco enorme", decía Luna triste, pero a la vez emocionada por haber llegado hasta tan lejos en el concurso.
Y, finalmente, después de las dos expulsiones, los espectadores vivieron uno de los momentos más esperados y emotivos de la noche: Alberto y Luna se fundían en un tímido beso al son de´'qué viva el amor', de Samantha, que no pudo reprimir su alegría ante este momento. La relación entre ambos concursantes comenzó durante el confinamiento e incluso ya han conocido a sus familiares cuando visitaron el plató del programa después del parón. Durante las últimas semanas les hemos visto planear viajes, lanzarse piropos... pero el beso se hacía de rogar.
Pero el 'plato' fuerte estaban por llegar. Mientras Ana, Andy e Iván se enfrentaban a la gran final en la cocina redonda del plató, todos los concursantes de la octava edición hacían su entrada para acompañarles en el último reto de la emocionante noche, Alberto y Luna iban los últimos y han acabado protagonizando un romántico beso en directo, mientras que todos los asistentes a este último programa han acompañado el bonito gesto con aplausos y vítores. ¡Viva el amor!