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El cacao natural es un ingrediente rico en antioxidantes con muchos beneficios para nuestra salud, además de proporcionarnos (como nos gusta creernos) la felicidad. Y es que, cuando lo consumimos, nos sentimos mucho mejor. Eso es culpa, en parte, de esos antioxidantes que se llaman flavanoles (unos compuestos de la familia de los polifenoles) y a su delicioso sabor. Además, contiene una importante cantidad de proteínas, minerales y fibra alimentaria, en concreto, esta última se encuentra en una proporción del 35 %, por lo que es, por tanto, bastante saciante. Numerosos estudios científicos insisten en su beneficio y, desde ¡HOLA! Cocina, no vamos a ponernos en contra. Al contrario, vamos a ayudarte a incluirlo en tus desayunos de una manera muy saludable.
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¿Por qué hablamos de cacao natural?
Porque es el que debemos incluir siempre que podamos, priorizando éste antes que cualquier otro cacao alcalinizado. Pero no te preocupes, vamos a explicarte las diferencias de manera rápida para que aprendas a diferenciarlos en el supermercado. Sí, ambos se encuentran al alcance de nuestra mano.
El cacao natural conserva intacta todas sus propiedades porque no ha sido sometido a procesos químicos, como sí le ha pasado al cacao alcalinizado. Su color es marrón claro, es amargo de sabor y, cuando lo mezclamos con cualquier líquido (nos da igual que sea frío o caliente) hace grumos. Muchos grumos. Sin embargo, el cacao alcalinizado es mucho más oscuro, es fácilmente soluble en agua o leche y su sabor es suave.
Y entonces, una vez que lo he encontrado, ¿cómo lo incorporo a mis desayunos?
Igual que el chocolate, porque el cacao natural es tan versátil como éste, pudiendo ser incorporado tanto en recetas dulces como saladas, en batidos y smoothies, en bizcochos o en tortitas. Además, es delicioso si se espolvorea y combinado con un vaso de leche es una bebida energética y saludable. Te damos varias ideas, todas ellas diferentes.
Paso a paso: smoothie de aguacate, cacao natural y manzana
En apenas unos minutos puedes elaborar este batido, de textura densa y cremosa, para desayunar o como un snack perfecto para media mañana.
Paso a paso: mug cake de cacao natural
Esta receta nos vale para desayunar, merendar o como postre. Y a los más pequeños de la casa les volverá locos, porque, además, se prepara rápido en el microondas y en raciones individuales.
Paso a paso: tortitas de avena y cacao natural
¿A quién no le apetecen unas tortitas de vez en cuando? Si le coges el truco, incluso, para todos los días, porque apenas te roban más de diez minutos. Estas se mezclan con avena para ser aún más saciantes.
Paso a paso: bocaditos de plátano con chocolate
Nada será más saludable si escoges una fruta y la bañas en chocolate o cacao. Y el plátano es uno de los que mejor nos combina. Aunque, si te apetece, puedes hacerlo con fresas o con sandía que, en nada, viene de temporada.
Paso a paso: porridge de chocolate y naranja
Otra opción para empezar con nuestro día, de una manera energética y saciante es hacer este porridge de chocolate y fruta, para demostrarte que también sabe combinarse con granada y naranja.
Paso a paso: galletas de avena y chocolate
Para los más clásicos, unas galletas. Sin levadura, pero con pepitas de chocolate que puedes cambiar por nibs de cacao y una mezcla de copos de avena y harina de trigo como base.
Paso a paso: arroz inflado al chocolate
Reinventamos en esta receta las clásicas tortitas de arroz inflado que puedes encontrar en cualquier supermercados, con una opción mucho más saludable y, quién sabe, quizás también te resulte más rica.
Paso a paso: tortitas de chocolate con frutos silvestres y jarabe de arce
Por último, aunque nos repitamos, también queremos incluir esta receta de tortitas de chocolate, porque aunque son un poco más elaboradas (siguen siendo saludables), te enamorarán para despertar un día del fin de semana.
