Clásica receta de caramelo que en proporción de la cantidad de agua que echemos podemos hacerla más o menos líquida. Ideal para usar en postres como flan, natillas, arroz con leche, helado... Ten mucha preocupación al manipular el caramelo caliente, sus quemaduras -junto a las de aceite- pueden llegar a ser de las más graves dentro de la cocina.
Pollo al limón: una receta rápida y deliciosaPor Susana Baticón