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No hay nada mejor para sentirse como en la "bella Italia" que saborear un delicioso, auténtico y esponjoso tiramisú. Es el postre italiano por excelencia, y si sabes cómo elaborarlo, tendrás el éxito asegurado cada vez que lo prepares. Tan solo tienes que tener en cuenta algunos pequeños tips para que tu tiramisú salga completamente irresistible. ¡Toma nota!
-Apuesta por un café de calidad, y mucho mejor si es recién hecho.
-No te servirá cualquier tipo de bizcocho. Necesitamos uno ligero y esponjoso que absorba bien el café, pero que no se desmigaje al humedecerlo. Lo ideal es usar bizcochos de soletilla, que además puedes encontrar con mucha facilidad en la mayoría de supermercados.
-Pero la auténtica clave de este dulce bocado, el secreto de su éxito, es el queso mascarpone. Huye de las recetas que te propongan sustituirlo por nata o por otro tipo de quesos, ¡eso no es un tiramisú! El mascarpone es el ingrediente estrella e indispensable de este postre, un queso dulce y cremoso originario de la región de Lombardía con un característico color marfil, un sabor caramelizado y una textura lisa y cremosa. Para conseguir un buen resultado, es importante utilizar uno de calidad. Te recomendamos Mascarpone Galbani, el queso idóneo para todos aquellos que aman el sabor inimitable del auténtico tiramisú italiano, que aporta la textura perfecta.
Apúntate esta receta y aprende a hacer un delicioso tiramisú de la mano de Galbani. ¡Sorprenderás a todos!
INGREDIENTES:
-500 g. de Mascarpone Galbani
-5 Huevos
-5 cucharadas de azúcar en polvo
-40 bizcochos de soletilla
-2 tazas de café fuerte sin azúcar
-2 cucharadas de vino dulce Marsala
-Cacao en polvo sin azúcar
PREPARACIÓN: Primero separa las claras de las yemas, y bata las yemas con el azúcar hasta que la mezcla claree. Añade el mascarpone Galbani, mezcla bien hasta conseguir una mezcla cremosa y consistente. Monta las claras a punto de nieve (un poquito de sal ayuda a que monten mejor). Mezcla la crema de mascarpone con las claras montadas hasta conseguir una crema homogénea. Mezcla el café frío y el Marsala (opcional) en un plato hondo y empapa los bizcochos. Coloca la mitad de los bizcochos en el fondo de una fuente (del tipo que se utiliza para gratinar), cúbrelos con la mitad de la mezcla hecha con los huevos, coloca el resto de los bizcochos y cúbrelo todo con la parte sobrante de la mezcla. Déjalo reposar en la nevera por lo menos durante 3 horas (aunque lo ideal es que repose durante un día). A la hora de servir, espolvorea el Tiramisú con cacao en polvo utilizando un tamiz. ¡Y a disfrutar!
El tiempo de reposo es imprescindible para conseguir una consistencia firme y una textura cremosa. Sabemos que es dificil esperar para probarlo, pero ¡no dejes que la impaciencia estropee tu esfuerzo en la cocina!
Además, ahora que se acerca la Pascua te proponemos esta versión ideal para estas fiestas. Haz click sobre la imagen para descubrir esta original receta.
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