Todos hemos oído hablar en los últimos tiempos de los llamados superalimentos, una terminología que no deja de responder a una estrategia de marketing pero que nos da pistas de que existen ciertos productos que cuentan con tantas propiedades para el organismo que bien merecen esa denominación.
Y, curiosamente, no son los alimentos que te pueden venir a la cabeza en un primer momento, como una suculenta carne de calidad o un pescado fresco, sino que, como otras tantas cosas que resultan de lo más atractivas, son productos que vienen en formato XS. Se trata de algunas semillas.
Siguiendo el ejemplo de China
La tradición gastronómica china, uno de los países cuya filosofía de vida más está calando en Occidente desde hace unos años -son uno de los países con una mayor tasa de longevidad, sobre todo en los rincones más recónditos, donde no ha llegado aún la globalización-, da un gran valor a las semillas como principal fuente nutricional en cualquier dieta.
Y si una de estas semillas está calando hondo actualmente por sus grandes propiedades es la de chía. No en vano, entre ellas cuenta con una gran dosis de fibra, esencial para regular el tránsito intestinal, o de ácidos grasos como el Omega 3, especialmente recomendado para las mujeres con menopausia, básico para el buen estado de, entre otras partes del cuerpo, las articulaciones.
Pero los beneficios con que cuenta la chía son mucho más amplios. Así, también tiene una importante carga calórica, lo que la convierte en un ingrediente muy apropiado para incluir en los desayunos, incorporándola como un cereal más en un yogur, por ejemplo, o poniéndola encima de unas tostadas con tomate y aceite de oliva virgen extra.
Dado que su sabor es suave y agradable, es uno de esos ingredientes que se pueden incorporar a nuestro día a día tanto en platos dulces como salados y así aprovechar otras de sus ventajas, como su aporte en calcio, magnesio, manganeso, cobre, zinc y vitaminas.
No tienes más que darte cuenta de cuánto tiempo se mantienen sin echarse a perder, para darte cuenta de que, además de todo lo anterior, estas semillas también cuentan con una gran carga de antioxidantes, con lo cual su consumo puede prevenir de ciertas enfermedades.
Tu nuevo propósito de año nuevo
Un ingrediente, por tanto, que debes pensar en incluir en tu alimentación, si aún no lo has hecho, como uno de tus propósitos más firmes para el año que viene. Y, además, no te olvides de que todo esto lo consigues de un plumazo sumando un par de cucharadas o tres repartidas a lo largo del día. Nunca resultó más cómodo estar bien alimentado.
Eso sí, no te olvides de que ningún alimento hace milagros, sino que sólo suman a una dieta que debe ser variada y equilibrada y que obtendrá aún mejores resultados si se combina con un poco de ejercicio.