Prueba este deliciosos postre de mango y chía
Las semillas de chía contribuyen a quemar grasas acelerando el metabolismo y su contenido en calcio ayuda a digerir las grasas consumidas durante el día, pero además combate la celulitis
La costumbre de tomar el postre viene desde la Antigua Roma. Habitualmente, preparaban infinidad de platos en sus festines. Para cambiar de uno a otro, ofrecían algo dulce como fruta, frutos secos o pan con miel. También era su forma de poner el colofón final a sus grandes celebraciones. Ellos lo denominaban secundae mensae.
A veces, y con la errónea idea de querer mantener la línea, renunciamos al bocado más deseado y apetitoso de la comida desde tiempos de los romanos. Y lo reservamos únicamente para días del fin de semana o para fechas especiales.
Una práctica errónea, ya que los nutricionistas recomiendan no hacerlo. Una dieta equilibrada es la que incluye en cada comida los nutrientes que el organismo necesita para afrontar la jornada. El menú ideal debe incluir proteínas, lípidos, carbohidratos, minerales y vitaminas. En este sentido, el postre suele estar compuesto por frutas, aportando a nuestro cuerpo las vitaminas, minerales, agua y fibra que necesita, ayudándolo así a realizar una buena digestión.
Quitarse el postre o ingerir menos calorías de las necesarias hace que nuestro organismo se ralentice para consumir menos energía y acumule grasa, porque no sabe cuándo vamos a reponérsela.
Una dieta equilibrada, el secreto para mantenerse en forma
Lo ideal es comer de todo y de forma equilibrada, hidratarse bien a lo largo de la jornada y practicar un mínimo de 30 minutos de ejercicio diario. De hecho, hay muchos postres que nos ayudan a llevar una dieta equilibrada e incluso nos pueden ayudar en la pérdida de peso, como es el caso de la receta que a continuación proponemos, a base de mango y chía.
El mango, gracias a su contenido en irviginia gabonensis, un potente antioxidante, nos ayuda a quemar grasa, eliminar toxinas, fortalecer nuestros tejidos y prevenir el envejecimiento prematuro. Su alto contenido en fibra prebiótica, además, ayuda en la digestión.
Las semillas de chía, por su parte, contribuyen a quemar grasas acelerando el metabolismo. Su contenido en calcio ayuda a digerir las grasas consumidas durante el día y su contenido en omega 3 combate la celulitis. También modera el apetito gracias a su efecto saciante y es un excelente regulador del intestino. Esta exótica combinación de mango y chía es un aliado perfecto para volver a disfrutar del postre y cuidar nuestra alimentación sin renunciar al sabor.
Ingredientes necesarios para elaborar esta receta
- 3 cucharadas de semillas de chía.
- 1 vaso de leche de coco.
- Miel.
- 1 yogur griego natural.
- Medio mango.
- Fresas para decorar.
- Menta para decorar.
Elaboración del postre
Primero debemos hidratar las semillas de chía. Para ello, las mezclaremos con la leche de coco en un bol y taparemos la mezcla con film transparente para que repose un mínimo de 4 horas en la nevera.
Pasado ese tiempo, incorporamos a la mezcla el yogur griego y la miel al gusto.
Lavamos y cortamos en pequeños trocitos el mango y ponemos en vasitos una capa y otra de la mezcla de semillas. Podemos hacer hasta 2 capas de cada mezcla en cada vaso y finalizamos la elaboración con fresas por encima y con un poco de menta para decorar.