No son pocos los beneficios que las fresas nos brindan. Tienen propiedades antioxidantes y antiinflamatorias y, además, tomadas en estado natural, pueden convertirse en grandes aliadas de la línea debido a su bajo aporte calórico. Asimismo, su versatilidad en cocina es amplia, pudiendo formar parte numerosas recetas tanto saladas como dulces. Este apetecible 'brownie' que hoy te enseñamos a preparar es un buen ejemplo. ¡Toma nota!
Ingredientes (para 6 porciones aproximadamente):
- 200 gr de chocolate para postres
- 150 gr de fresas
- 120 gr de azúcar
- 100 gr de mantequilla
- 4 huevos
- 50 gr de nueces
- 50 gr de harina
- 1 cucharada de canela en polvo (15 gr)
- 1 cucharada de vainilla azucarada (15 gr)
Elaboración:
- Antes de empezar con la receta, debes trocear las nueces y las fresas para tenerlas preparadas y así ahorrar tiempo más adelante.
- Precalienta el horno a 150º C mientras sigues preparando el brownie.
- Parte en trozos el chocolate e introdúcelo en un cuenco. Añade al mismo la cantidad indicada de mantequilla y mételo en el microondas hasta que se haya fundido por completo.
- Separa las yemas y las claras de los huevos. Reserva las yemas en un cuenco aparte. Bate las claras hasta que lleguen al conocido ‘punto de nieve’.
- Recupera el cuenco de las yemas y añade el azúcar. Bátelo muy bien hasta que compruebes que se haya creado una mezcla uniforme. Añade el chocolate y la mantequilla, y mézclalo nuevamente todo hasta conseguir una masa homogénea.
- Unta mantequilla o harina en el molde que vayas a utilizar para poder retirarlo una vez hecho el brownie. Añade seguidamente la masa a dicho molde e introdúcelo en el horno subiendo la temperatura a 180º C.
- Cuando el brownie lleve 15 minutos dentro, sácalo un momento para esparcir los trozos de fresa por la superficie. Vuelve a introducir el brownie al horno y deja que termine de elaborarse, esperando aproximadamente otros 15 minutos. Puedes comprobar su densidad pinchando el bizcocho con un cuchillo o un palillo hasta que salga completamente limpio.
- Saca el brownie del horno y pártelo en varios trozos. Deja que se enfríe metiéndolo en la nevera y... ¡ya estará listo para degustar con los tuyos!