La popular presentadora Silvia Jato, que lanzó a la fama en su día el espacio Pasapalabra, con el que triunfó durante cinco años, y su marido, el piloto de aviación Eduardo San Román, al que conoció ese mismo año en Miami, cuando, a
causa del huracán Heidi, no pudo proseguir vuelo hacia su destino, han decidido poner fin a su matrimonio, según ha podido saber ¡HOLA! de fuentes próximas a la pareja. Jato y San Román se casaron en octubre de 1998 y son padres de tres hijos: Luca, de ocho años, Claudia, de seis, y Lucía, de dos años y cinco meses.
Ni Silvia ni Eduardo han querido pronunciarse al respecto, dado que quieren seguir manteniendo como hasta ahora la discreción y la privacidad en todo lo que respecta a su vida personal y familiar.
La noticia de la ruptura —aún no han iniciado, que se sepa, trámite judicial alguno de cara al divorcio— ha llegado coincidiendo casi con el momento en que la presentadora iniciaba, esta misma semana, en Telemadrid, un interesante concurso bajo el título Metro a Metro, en el que los concursantes de la Comunidad de Madrid podrán participar en el concurso respondiendo a las preguntas sobre datos históricos de la región madrileña.