Keira Knightley se encuentra estos días en Nueva York inmersa en el en el rodaje de Collateral Beauty, una producción norteamericana en la que comparte protagonismo con actores como Willy Smith, Kate Winstley o Edward Norton. La película cuenta la historia de una americana que cae en una profunda depresión después de vivir una tragedia personal. La actriz británica ha regresado con fuerza al trabajo después del nacimiento de su primera hija, Edie, hace ahora casi un año. Antes de embarcarse en este rodaje, la protagonista de Orgullo y prejuicio estuvo trabajando en la obra de teatro Teresa Raquin en Broadway.