16 MARZO 2004
La idea de que el Príncipe Felipe y su prometida, doña Letizia Ortiz puedan disfrutar de una residencia oficial en Asturias planea en el Principado desde el mismo día del anuncio de su compromiso matrimonial. La iniciativa, sin embargo, surgió hace ya años cuando se consideró que dada la especial relación del heredero a la corona con Asturias, éste debía poseer una casa para su disfrute en el Principado. A pesar de que se barajaron varios inmuebles como el Palacio de Revillagigedo –un palacete que se hizo construir el primer Marqués de San Esteban en 1704 y que actualmente alberga el Centro Internacional de Arte Contemporáneo de Gijón- la idea no pareció fraguar entonces y poco a poco quedó en el olvido.
Sin embargo, el anuncio del compromiso matrimonial de don Felipe de Borbón con una asturiana revitalizó la iniciativa que parece ser aplaudida por todos los sectores implicados, aunque no se hay nada definitivo. Desde el Gobierno regional se dice que ‘el Principado estaría encantado de que esa posibilidad se produzca porque entendemos que es muy positiva para Asturias’ –comentó hace escaso tiempo su portavoz Ana Rosa Migoya- a lo que se añade ‘estaríamos satisfechos de que se lograra una residencia adecuada para la pareja, pero no creemos que la iniciativa tenga que partir del Gobierno del Principado’.
La propuesta de los empresarios
En la misma idea incidió la Alcadesa de Gijón, Paz Fernández Felgueroso, quien manifestaba ‘hay que ver si existe un grupo de empresarios que aúne sus esfuerzos y esté dispuesto a impulsar un proyecto de este tipo, si se quiere beneficiar de sus resultados’ con lo que descartaba que la hipotética inversión tenga que venir de la Administración. La alcadesa aludía claramente al grupo de empresarios del sector turístico que promueven, desde que se anunció el compromiso matrimonial de heredero al trono, la propuesta para que la pareja tenga una residencia en Asturias.
El Gobierno asturiano apela en este tema a la prudencia y comenta que, antes de poner en marcha la idea 'es necesario contar con el visto bueno de los interesados y la dirección general de Patrimonio, dado que las residencia de la Familia Real española son supervisadas por este órgano'. Algo que, desde Zarzuela, se matiza ‘eso no es del todo correcto porque Patrimonio sólo entraría en juego dependiendo de qué casa estemos hablando. Si es un particular quien la cede, no debería pasar este trámite’. El Gobierno del Principado veladamente considera que debe ser la Casa del Rey quien lo solicite, algo que no se ha producido, ya que Palacio, descarta por el momento esta petición.
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