Robert Ballard, nacido el 30 de junio de 1942 en Wichita, Kansas, es un oceanógrafo, explorador y arqueólogo submarino estadounidense. A él se debe el hallazgo de barcos tan emblemáticos como el Titanic en 1985, el acorazado alemán Bismarck (hundido en 1941) o el portaaviones norteamericano Yorktown así como el descubrimiento de dos barcos fenicios que se hundieron en el 750 antes de Cristo frente a las costas de Israel.
Su pasión por el mar... una forma de vida
Ballard creció entre San Diego y Los Ángeles y desde muy pequeño desarrolló una gran fascinación por el océano. Asistió a la Universidad de California en Santa Bárbara, donde se licenció en química y geología en 1965. Como miembro del Cuerpo de Entrenamiento de Oficiales de Reserva ingresó al ejército después de graduarse cumpliendo una gira de dos años antes de solicitar un traslado a la marina. En 1967 fue destinado a la Institución de Investigación Oceanográfica Woods Hole (Massachusetts), donde se convirtió en científico marino a tiempo completo en 1974 después de completar un doctorado en geología y geofísica marinas en la Universidad de Rhode Island .
Su descubrimiento de los restos del Titanic
A principios de la década de 1970, Ballard ayudó a desarrollar Alvin, un sumergible para tres personas equipado con un brazo mecánico que se usó para explorar la Cordillera del Atlántico Medio, pero no sería el único transporte que desarrollaría pues también diseñó una serie de embarcaciones, entre las que destaca el Argo, un trineo sumergible de 5 metros equipado con una cámara controlada a distancia que podía transmitir imágenes en vivo a un monitor.
Para probar el Argo, buscó el Titanic y junto a su equipo encontraron el mítico barco el 1 de septiembre de 1985 a una profundidad de 3.800 metros en el Atlántico norte. "El Titanic era claramente el gran Monte Everest en ese momento", señalaba el explorador. "Muchos otros lo habían intentado. Muchos pensé que habrían tenido éxito, o que deberían haberlo tenido pero no lo hicieron".
En sus memorias, tituladas En lo Profundo, Robert recuerda que en 1997 asistió al estreno de la legendaria película -protagonizada por Kate Winslet y Leonardo Di Caprio- con el director de la misma, James Cameron, quien se dirigió a él y le dijo: "Ve tú primero. Tú lo encontraste".
Pasión por enseñar las profundidades del mar
Además de su faceta de explorador oceanográfico y geólogo marino, Robert ha dado clases en la Universidad de Rhode Island, desempeñado funciones de escritor y comentarista científico y ha dirigido varias instituciones de investigación submarina. Entre las más conocidas figura el proyecto Jason, creado por Ballard en 1989 para fomentar el conocimiento del mar entre las nuevas generaciones de jóvenes.
A pesar de sus grandes logros, Robert Ballard, a quien también se debe la exploración minuciosa de la dorsal atlántica y los fondos marinos de las islas Galápagos, no se cansa de repetir: "No me considero heredero de los exploradores del siglo XV, pero me gustaría ganar algún día ese título". Y es que según reconoce él mismo "quedan muchas sorpresas aguardando en el fondo del océano".
Sobre la tragedia ocurrida en 2023 en la que cinco personas perdieron la vida durante una expedición dentro de un submarino Titan para visitar los restos del Titanic, Robert señaló en una entrevista para National Geographic que "Si no estudias la historia, estás condenado a repetirla", dijo al lamentar lo sucedido.
Robert ha liderado numerosas expediciones para estudiar los océanos y ha utilizado tecnología avanzada, como vehículos submarinos no tripulados, para realizar descubrimientos en lugares remotos y difíciles de alcanzar. Además del Titanic, ha explorado y descubierto numerosos restos de barcos antiguos y naufragios.
Su propia embarcación: el Nautilus
Pero la búsqueda continúa. Robert, con más de 80 años, todavía dedica sus días al océano y lo hace con su propia embarcación a la que ha bautizado como Nautilus, el nombre de la nave submarina del capitán Nemo en la historia clásica que le inspiró a "soñar a lo grande", Veinte mil leguas de viaje submarino, de Julio Verne.