Ha entrado en la historia del deporte de España y del mundo por la puerta grande. Su nombre es conocido universalmente y no es para menos, pues sus méritos en las pistas de tenis han hecho que su nombre se escriba con letras de oro. Rafael Nadal comenzó a jugar al tenis con tan solo 4 años animado por su tío Toni Nadal, quien se convertiría en su entrenador y su gran confidente.
Natural de Manacor, Mallorca, Rafa destacó desde muy pequeño como un gran deportistas aunque tras probar sus destrezas en el fútbol y el baloncesto, fue el tenis el que le dejó cautivado. Sus padres, Ana María Parera y Sebastián Nadal le apoyaron desde el principio intentando que el gran sueño de su hijo se hiciera realidad. Rafa, quien tiene una hermana menor que él llamada María Isabel, es sobrino del ex futbolista Miguel Ángel Nadal, quien militó en las filas del FC. Barcelona, del RCD Mallorca y de la Selección Española, por lo que el apellido Nadal ya era conocido deportivamente hablando.
Aunque zurdo dentro de las pistas, Rafa es diestro fuera de ellas, de ahí que su revés le haya hecho en muchas ocasiones ‘invencible’. Con 9 títulos de Grand Slam en sus estanterías, Nadal ha conseguido aquel sueño que una vez tuvo de niño y que era convertirse en el número uno del mundo, y lo hizo, porque los sueños cuando se persiguen con la esperanza y la ilusión de ser alcanzados, en muchas ocasiones suceden, y el suyo lo logro el 18 de agosto de 2008, destronando al suizo Roger Federer a una segunda posición.
El manacorí, quien ha llevado su tierra con orgullo por todos los rincones del mundo, es el tenista masculino más joven de la historia en conseguir el Golden Slam de Carrera, que incluye los cuatro Grand Slam y la medalla de oro de los Juegos Olímpicos, aunque no obtenidos de manera consecutiva ni en el mismo año, a los 24 años y 103 días. Este logro sólo es compartido por André Agassi, que lo consiguió a los 29 años y 38 días.
A pesar de su currículo envidiable, Rafa ha sabido mantener los pies en la tierra, quizás como nadie hubiera imaginado, debido a su fama mundial. Convertido también en el primer tenista masculino de la historia en conseguir ganar en un mismo año (2010) tres Grand Slam en tres superficies distintas, Nadal ha intentado vivir su juventud como un chico más, escapándose en verano con sus amigos para disfrutar por las Islas Baleares de unos merecidos días de descanso.
Durante su trayectoria profesional, Rafael ha sufrido y superado algunos duros golpes, entre ellos la separación de sus padres en junio de 2009, un desenlace inesperado para el joven tenista que se unió a una racha de lesiones en las rodillas repercutiéndole de manera radical en su buen juego. Pero debido a su gran fortaleza tanto física como mental, el tenista logró superar estos varapalos arropado por su familia y, por su novia, Xisca Perelló, una joven a la que conoció cuando tenía tan solo 14 años y de la que no se ha separado jamás.
Discreta y sencilla, Xisca siempre ha intentado mantenerse en un segundo plano dejando todo el protagonismo a su chico, con el que ha conseguido mantener una sólida e inquebrantable relación basada en fidelidad. Con la carrera de Administración y Dirección de Empresas, Xisca se ha convertido en la acompañante perfecta de este número uno manteniendo a su lado tanto en las victorias como en las derrotas dentro y fuera de las pistas de tenis.