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La infanta Cristina© GettyImages

Cristina de Borbón y Grecia

A los 24 se convirtió en la primera mujer de la Familia Real española con título universitario. Y eso la define. Discreta y trabajadora , la infanta Cristina ha forjado paso a paso su existencia, basada en el amor a su familia, el respeto a su condición de infanta, y su inmenso deseo de vivir, a pesar de los altibajos a los que ha tenido que hacer frente y que en ciertas ocasiones llegaron a mermar sus fuerzas


Actualizado 1 de marzo de 2024 - 10:10 CET
59 años
Madrid, España
Horóscopo : geminis

Cristina de Borbón y Grecia, cuyo nombre completo es María Cristina Federica Victoria Antonia de la Santísima Trinidad de Borbón y Grecia, , nació el 13 de junio de 1965 en Madrid y es la hija pequeña del rey Juan Carlos y la reina Sofía y es, desde su nacimiento, infanta de España.

Sus padrinos

Al igual que sus hermanos mayores, la Infanta Elena y el príncipe Felipe, ahora rey de España, creció en el palacio de La Zarzuela, el mismo lugar en el que fue bautizada por el arzobispo de Madrid, el 21 de junio de 1965, siendo sus padrinos Alfonso de Borbón y Dampierre, duque de Cádiz y la infanta María Cristina de Borbón y Battenberg.

Actualmente ocupa el sexto lugar en la línea de sucesión al trono de España, después de sus sobrinas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, su hermana, la infanta Elena y sus sobrinos, Felipe Juan Froilán y Victoria de Marichalar. 

Estudios

Cursó sus estudios secundarios en el colegio Santa María del Camino de Madrid al igual que su hermana Elena y desde 1984 estudió Ciencias Políticas en la Universidad Complutense de Madrid, obteniendo la licenciatura en 1989.

Inquieta culturalmente y cercana. A la infanta Cristina no es fácil verla quieta. Nada más acabar la carrera, con 24 años, se marchó de España para ampliar horizontes y empaparse del saber que viene de todos los rincones del mundo.

Estudió, además de la licenciatura en Ciencias Políticas, francés, inglés y griego; asistió a un curso de posgrado en Relaciones Internacionales en la New York University y trabajó unos años en París, en la sede de la Unesco, en temas relacionados con Ciencias Sociales y Humanas. Casi a la par que los Juegos Olímpicos de Barcelona 92', la Infanta se traslada a la Ciudad Condal e inicia su trabajo como Coordinadora de Programas del Tercer Mundo de la Fundación La Caixa.

Su boda con Iñaki Urdangarin

La inquietud profesional, y deportiva (otra de sus grandes pasiones, en especial la vela), no impidieron que doña Cristina viviera una historia de amor muy singular al lado del por aquel entonces jugador de balonmano Iñaki Urdangarin. 

La infanta y el deportista se conocieron en 1996 durante los Juegos Olímpicos de Atlanta, donde él competía en el equipo nacional español y ese encuentro fue el comienzo de una relación que pronto se fue afianzando, tanto que en cuestión de un año, el 30 de abril de 1997, Zarzuela anunció su compromiso matrimonial.

El 4 de octubre del mismo año, la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin se casaban en la catedral de Barcelona, ciudad en la que han establecido su residencia. Un mes antes el rey don Juan Carlos les había concedió el ducado de Palma de Mallorca, un título que les fue revocado por el rey Felipe VI el 11 de junio de 2015, cuando la Infanta y su marido se encontraba imputada por delito fiscal en el caso Nóos.

Sus cuatro hijos

La familia comenzó a crecer el 29 de septiembre de 1999, cuando la infanta dio a luz a su primer hijo, Juan Valentín de Todos los Santos. Un año más tarde (el seis de diciembre de 2000) nació Pablo Nicolás. Iñaki Urdangarin, tras la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Sydney, abandonó su carrera deportiva para dedicarse más a sus deberes como Duque de Palma y padre de familia numerosa. El 30 de abril de 2002, la infanta Cristina dio a luz a su tercer hijo, Miguel, un bebé precioso. Y como a la tercera no fue la vencida, probaron una nueva vez y acertaron. El 5 de junio de 2005, doña Cristina daba a luz a su primera hija a la que llamarían Irene.

Durante años, la Infanta Cristina desempeñó un papel activo en la vida pública de España, representando a la Corona en eventos oficiales y actividades benéficas. Sin embargo, su imagen se vio empañada por su asociación con el caso Nóos, un escándalo de corrupción que involucraba a su esposo.

Su traslado a Washington

Sin embargo, antes de que la historia de amor de Cristina e Iñaki se viera ensombrecida por el escándalo de corrupción relacionado con el Instituto Nóos, una entidad sin fines de lucro presidida por el duque de Palma que pretendía promover el turismo y los eventos deportivos en las Islas Baleares y la Comunidad Valenciana, el matrimonio junto a su numerosa familia se trasladó a Washington, ciudad en la que Iñaki Urdangarin fue contratado por Telefónica para ejercer de consejero en dicha ciudad norteamericana.

Apoyando profesionalmente a su marido doña Cristina abandonó su casa del barrio barcelonés de Pedralbes para comenzar una nueva vida en Washington, eso sí, sin dejar de lado sus actividades oficiales como Infanta ni su puesto en calidad de Directora del área Social de la Fundación La Caixa.

Caso Nòos

Pero en 2011 el caso Nóos estalló por los aires y la reputación del matrimonio fue puesta en jaque. Urdangarin, fue acusado junto a su socio Diego Torres de haber utilizado el Instituto Nóos como fachada para desviar millones de euros de fondos públicos a empresas privadas.

La infanta Cristina fue implicada en el caso porque era miembro de la junta directiva de una empresa vinculada al Instituto Nóos y también porque se benefició indirectamente de los fondos desviados. Sin embargo, ella siempre ha negado tener conocimiento de las actividades fraudulentas.

En 2016, tras un largo proceso judicial, la Infanta Cristina fue absuelta de los cargos más graves, pero encontrada culpable de cooperación en fraude fiscal, aunque posteriormente se anuló esa condena. Iñaki Urdangarin, por su parte, fue condenado a varios años de prisión por delitos de malversación, fraude fiscal, prevaricación y tráfico de influencias.

Con anterioridad a este juicio, el rey Felipe había revocado a su hermana el título de duquesa de Palma que le concedió su padre, el rey Juan Carlos, con motivo de su boda con el jugador de balonmano Iñaki Urdangarin. Además tras su proclamación y con el cambio en la titularidad de la Corona, tanto la infanta Cristina como doña Elena dejaron de ser parte de la Familia Real para pasar a ser "familia del rey".

Su vida en Ginebra

En septiembre de 2013, la infanta se traslada con su familia a residir a Ginebra, donde la Fundación La Caixa le encargó que coordine sus programas con agencias de la ONU. Desde entonces, la infanta trabaja en la Fundación Aga Khan (AKF), con sede en Ginebra, como coordinadora de interagencias dentro de la Aga Khan Trust For Culture.

Su separación

A pesar de los desafíos y dificultades a los que se enfrentó el matrimonio, la pareja continuó unida ante la adversidad, y aunque parecía que no hay nada ni nadie pudiera separarles(ni siquiera la estancia en prisión de Iñaki), en enero de 2022 y contra todo pronóstico, doña Cristina e Iñaki Urdangarin anuncian en un comunicado su decisión de separarse tras 25 años de matrimonio, tan solo unos días después de que unas fotos del exjugador del balonmano de la mano de otra mujer (Ainhoa Armentia) dieran la vuelta al mundo.

“De común acuerdo, hemos decidido interrumpir nuestra relación matrimonial. El compromiso con nuestros hijos permanece intacto. Dado que es una decisión de ámbito privado, pedimos el máximo respeto a todos los que nos rodean” se puede leer en el comunicado.

Firma del divorcio

Sin embargo, no es hasta dos años más tarde, en diciembre de 2023, cuando doña Cristina e Iñaki firman su divorcio de mutuo acuerdo. Ante notario, cumpliendo los requisitos exigidos por el Código Civil y asistidos por su abogado de familia.

De esta manera y tras muchos años de calvario, sus amigos aseguraban a ¡HOLA! que la infanta "ha encontrado la paz" y que no quiere oír hablar de novios y mucho menos volver a casarse. “No quiere atarse a nadie ni a nada”, nos dicen las mismas fuentes; "quiere vivir su libertad, así que parece que va a seguir los pasos de su hermana", quien aseguró que no volvería a pasar por el altar cuando se divorció de Jaime Marichalar, en 2009, y lo ha cumplido.

© ¡HOLA! Prohibida la reproducción total o parcial de este reportaje y sus fotografías, aun citando su procedencia.

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