El diseñador Adolfo Domínguez, creador de la famosa frase "la arruga es bella", nació en un pueblecito de Ourense llamado Puebla de Trives y creció correteando entre las telas que abarrotaban el taller de sastrería que frecuentaban sus padres. Sin embargo, su primera opción no fue heredar el negocio familiar sino emprender su propio vuelo.
Estudios y formación
A pesar de que irremediablemente absorbió muchos conocimientos sobre diseño en la niñez, Adolfo se matriculó decidió matricularse en Filosofía y Letras de la Universidad de Santiago de Compostela desde donde posteriormente se trasladó a París para estudiar Bellas Artes y Cinematografía en la Universidad Vincennes de París.
A finales de los 70 decidió regresar a España y en 1983 influenciado por tres de los diseñadores japoneses que despuntaban en aquel momento (Yohji Yamamoto, Rei Kawakubo e Issey Miyake) decidió montar su marca de diseño de ropa en el seno de la sastrería familiar.
Cuarenta años después, Domínguez ha creado un verdadero imperio que cuenta con numerosas tiendas repartidas por medio mundo en régimen de propiedad y en franquicia y con prendas femeninas y masculinas, accesorios y complementos, en los que destacan sus perfumes y una línea de tratamiento cosmético.
El estilo de Adolfo Domínguez
Las piezas más sólidas de sus colecciones son las de sastrería, de impecable corte y factura. Se trata de diseños funcionales y distendidos que se dirigen a un amplio público masculino y femenino comprendido principalmente entre los 30 y los 45 años.
Su estilo es eminente práctico y creado para una mujer activa, integrada en el mundo del trabajo, donde el traje sastre es una prenda fundamental. La gama de complementos engloba desde bolsos a bisutería, que combinan lo atractivo con la discreción.
Activo defensor del medio ambiente, este diseñador fue pionero en utilizar tejidos ecológicos, especialmente el lino, un material que le era de sobra conocido pues cuando era pequeño su abuela lo cultivaba, hilaba y tejía. De hecho fue este tejido el protagonista del vestuario de la famosa serie norteamericana Miami Vice al que dio forma el modisto gallego, agrandando aún más su fama.
Con su primera línea más que asentada en el mercado, este gallego adelantado a su tiempo lanza al mercado nuevas líneas: U Chico y Chica (2003), AD+ (2004), Adolfo Domínguez Niños (2004), Mi Casa (2005), Joyas (2008), Novias (2008), Mascotas (2008), The Music Collection (2009) y U+ (2009).
Su frase más emblemática: 'la arruga es bella'
También en el terreno de la publicidad destacó su capacidad de innovación, con su eslogan "la arruga es bella", como hemos adelantado anteriormente, el cual supuso un punto de inflexión en las campañas de los diseñadores españoles y que aún no ha sido superada. “Para mí, la manera en que vestimos refleja lo que somos. Y en cada rostro está escrita la historia de cada ser humano. Quise que mi ropa fuera una segunda piel y de ahí mi eslogan de la arruga es bella”.
¿Cuál es el perfume más famoso de Adolfo Domínguez?
Visionario y creador de tendencias, al diseñador no le importa apostar, sin saber anteriormente, si su nuevo invento será un éxito o un fracaso, por eso también se lanzó al mundo de las fragancias y afortunadamente triunfó con el lanzamiento de su perfume "Agua de Rosas", el cual se ha convertido en uno de los favoritos de mujeres de muchos países.
Vida personal
Se casó con Elena González Álvarez con quien tuvo a sus tres hijas; Adriana, quien en mayo de 2019 se convirtió en consejera delegada de la marca y Tiziana y Valeria, quienes se encargan del diseño y de la parte tecnológica, respectivamente.