Con el verano y las altas temperaturas más presentes que nunca, nuestra rutina de maquillaje debe cambiar por completo con respecto a la que solemos seguir en los meses más fríos del año. Y es que, de acuerdo a la opinión de numerosos profesionales, las técnicas beauty y productos que utilicemos en estos momentos no pueden ser los mismos que los de entonces, ya que podrían dañar la piel y arruinar nuestro makeup. Para ayudarte a salir victoriosa en esta época de calor, te recordamos once errores muy comunes que deberás evitar si deseas lucir radiante esta temporada.
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No hidratar correctamente la piel
Antes de comenzar con cualquier maquillaje es imprescindible hidratar la piel. Para ello, además de hacerte con un protector solar que te proteja de los rayos UVA y UVB del sol, necesitarás una crema hidratante que se adapte a tus necesidades. En caso de que no los utilices, el look durará intacto menos tiempo y podrá agrietarse, lo que, a la larga, puede dar la sensación de un aspecto descuidado.
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No utilizar protector solar
Tal y como te comentábamos previamente, proteger la piel de los rayos solares es imprescindible durante todo el año. Sin embargo, la importancia de esta acción se incrementa considerablemente en verano, cuando estos pueden resultar aun más dañinos de lo habitual. Por eso, es fundamental que, justo después de extender la crema hidratante, apliques un protector con SPF50.
Utilizar muchos cosméticos
Por norma general, en esta época del año los expertos recomiendan maquillajes sencillos y naturales que no impliquen el uso de demasiados productos. Un error que debemos evitar si queremos disfrutar de una piel jugosa, hidratada y, sobre todo, limpia. Y es que, de no hacerlo, nuestra dermis no traspirará adecuadamente y provocaremos, por consiguiente, un aumento de las posibilidades de aparición de acné.
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No utilizar productos ligeros
Con los primeros indicios de bronceado a la vista, las bases de maquillaje ya no son consideradas como imprescindibles dentro de nuestra rutina beauty. En su defecto, los profesionales recomiendan apostar por cosméticos ligeros que den paso a resultados poco densos o recargados. Así, las BB Creams se han convertido en la opción más elegida. Y no es de extrañar, ya que unifican el tono de la piel y la mantienen protegida e hidratada en todo momento.
No usar prebase en los ojos
Muchas veces renunciamos a maquillarnos los ojos al pensar que esto nos puede acabar generando picores o molestias incómodas a causa de las altas temperaturas. Igualmente, tendemos a creer que, si lo hacemos, nos veremos obligadas a renunciar a resultados naturales, pero nada más lejos de la realidad. Solo hay que elegir tonos que nos sienten bien. Para fijarlos bien y asegurarnos de que no se difuminen con el paso de las horas, los expertos recomiendan aplicar una prebase sobre el párpado antes de extender la sombra elegida.
No realizar una limpieza facial diaria
Preparar el rostro justo antes del maquillaje es importante, sí, pero de nada servirá si no dedicamos tiempo a cuidarlo cada mañana. En este sentido, los profesionales afirman que es imprescindible realizar una limpieza diaria. Esto nos ayudará a despedirnos de esas impurezas y células muertas que nos impiden lucir radiantes.
Apostar por coloretes oscuros
Al igual que las bases de maquillaje, los blushes oscuros deben quedar guardados en el cajón durante estos meses. Y es que, aunque son ideales para complementar nuestros looks otoñales e invernales, en verano resultan poco favorecedores. Así, lo mejor es que te decantes por coloretes en tono melocotón. Te ayudarán a obtener un resultado fresco y natural, perfecto para todo tipo de ocasiones.
Olvidar las fórmulas 'waterproof'
Estos productos están pensados específicamente para aguantar pese al agua o la humedad, por lo que son los más indicados para la etapa veraniega. Además de las máscaras de pestañas o los eyeliners, ahora hay muchos otros productos diseñados para protegernos del clima y las altas temperaturas. Si dedicas tan solo un par de minutos a buscar, encontrarás que son muchas las marcas que ofrecen sombras y coloretes resistentes al agua.
No proteger los labios
Es cierto que solemos dedicar bastante tiempo a proteger nuestro rostro de las inclemencias del clima. Sin embargo, muchas veces nos olvidamos de una zona que también es víctima del calor y la humedad: los labios. Para mantenerlos cuidados en cada momento, lo más recomendado es cubrirlos con un bálsamo labial con SPF que los mantenga bien hidratados.
Abusar del corrector
Este es otro de esos errores clásicos que, por más que pase el tiempo, seguimos cometiendo con más frecuencia de la deseada. El corrector de ojeras permite cubrir rápidamente las imperfecciones y nos ayuda a lucir frescas y radiantes. Ahora bien, para conseguir el resultado esperado, es necesario tener en cuenta estos dos consejos: elegir un corrector uno o dos tonos más claros que nuestra piel y aplicar poca cantidad.
Olvidarte del cuello y el escote
En invierno estas dos zonas suelen ir cubiertas, por lo que no debemos prestarles excesiva atención. Sin embargo, en verano no podemos ignorarlas. Y es que, si a la hora de maquillarnos no les damos algo de color, la diferencia de tono con tu rostro se notará demasiado y el resultado no será el deseado.