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Que Corea es ahora el epicentro de la belleza es una realidad. Todas las novedades de la k-beauty las adaptamos como mantras en nuestra rutina facial. Desde la cosmética fermentada hasta exfoliar nuestro rostro con dedales de seda, queremos probar todas las modas del país asiático porque, realmente, funcionan. La cosmética coreana tiene solución a todos y cada uno de los problemas beauty que se nos presentan, como este: ¿a ti también se te va el maquillaje súper rápido porque tienes la piel grasa? En épocas de altos niveles de estrés y ansidedad,es habitual que el rostro se vuelva más graso. También puede ser la consecuencia de llevar una alimentación que no es la adecuada o por vivir en una zona con elevados marcadores de contaminación. Mientras estamos en proceso de solucionarlo, con una buena rutina que se adapte a las necesidades de nuestra piel, encontramos soluciones como esta para que nuestro maquillaje dure intacto por más tiempo.
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Como desenlace a buscar que el maquillaje se mantenga en perfectas condiciones a lo largo del día surge el Jamsu, una técnica coreana con la que conseguimos evitar los brillos y fijar el maquillaje. Como su propio nombre indica, Jamsu, que significa "sumergir en agua", consiste exactamente en esto. Una vez apliques tu corrector y base de maquillaje, sumerge la cara durante 30 segundos en un bol con agua fría, aunque también puedes aplicar a pequeños toquecitos el frío con ayuda de un hielo. Pero, ¿es segura y efectiva?
'Jamsu', paso a paso
Si tienes la piel sensible olvida la técnica del hielo, y hazlo con ayuda de un bol amplio y agua fría. Los expertos de Garnier cuenta que "después de haber realizado esta técnica, tu rostro se verá mate, suave y con pocas imperfecciones. A simple vista, tu piel lucirá muy aterciopelada. Además, incluso hace más fácil aplicar el maquillaje en los ojos y los labios". Sigue estos pasos para probarlo:
- Limpia e hidrata tu piel: realiza la doble limpieza para asegurarte de tener la piel preparada.
- Aplica el corrector y los polvos matificantes: cubre las imperfecciones y aplica los polvos hasta que el rostro quede prácticamente blanco.
- Sumerge la cara en agua durante 30 segundos y sécala a pequeños toquecitos: recuerda no arrastrar, para que tu maquillaje quede intacto.
- Termina tu maquillaje con máscara de pestañas, polvos bronceadores, labial...
Pero, ¿por qué agua fría? Desde Garnier lo explican, "una temperatura baja ayuda a suavizar la piel, minimizar los poros y a promover la buena circulación sanguínea. Si realizas esta técnica, al menos, dos veces por semana, notarás tu cutis mucho más suave, sedoso y agradable al tacto".
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Si optas por aplicar el frío con ayuda de un hielo hay una serie de precauciones que tienes que tener en cuenta. Procura no aplicar el hielo directamente en tu piel, sobre todo si tienes la piel sensible porque puede dañarla y provocar rojeces. Hazlo utilizando un paño o una toalla, o sustitúyelo por el Jamsu que hoy te hemos presentado.
