Esta temporada hemos visto como los bobs conquistaban las tendencias en sus variantes más estilosas, desde el airy blunt hasta el wavy, por tratarse de un look muy versátil que se adapta a cabellos rizados, lisos, gruesos o finos. Sin embargo, parece que le ha salido un digno competidor pues los peluqueros anuncian las bondades del pixie a los cuatro vientos: "Es el resultado de un estilo andrógino, apetecible y sexy. Es muy práctico, cómodo de llevar y nos devuelve un aire fresco lleno de dinamismo para un cambio radical de estilo", apuntan desde el salón madrileño Blow Dry Bar. Eso sí, admiten que es un corte con el que no se atreven todas, por ello, como empujón final a aquellas que estén tonteando con la idea, revelan cuáles son las 4 razones por las que apuntarse a la moda del pelo (muy) corto merece la pena.
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1. Da volumen al pelo fino
Con efecto instantáneo, el pixie consigue un extra de elevación en la zona de las raíces, así lo aseguran desde Blow Dry Bar: "Si lo que queremos es asegurarnos el volumen y el grosor, este tipo de corte es el idóneo. Con capas largas en la raíz y en la parte delantera que aportarán personalidad y cuerpo a nuestro cabello". Como extra, David Lorente, director del salón que lleva su nombre, asegura que te hace parecer más alta sin subirte a unos tacones: "La longitud de la melena es inversamente proporcional a la longitud global que aparentamos. Las melenas XL no hacen sino crear una imagen desproporcionada que en lugar de favorecer acorta mucho la figura. El pixie es la mejor opción, por encima de los cortes garçon".
2. Ahorra tiempo
Esther González, de Menta Beauty Place, destaca uno de sus beneficios más atractivos y es que "tener el pelo corto nos permite peinarlo con más facilidad y en menos tiempo, reduciendo los minutos de lavado, aclarado, desenredado... y el pasarnos horas con el secador o la plancha para que quede perfecto". Añade que "no estorba, su comodidad es inmensamente mayor a la de una melena larga porque no nos da calor ni molesta en la cara, tampoco hace falta recogerlo a la hora de hacer deporte".
Ni que decir tiene lo rápido que se consigue un acabado perfecto: "Si lo que te sienta bien es el volumen, puedes revolverlo para conseguir ese efecto despeinado, engominarlo, peinarlo hacia delante o hacia un lado... El pelo corto te permite estar lista en diez minutos escasos, tardarás la mitad de tiempo en arreglarte".
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3. Nunca vivirás otro 'bad hair day'
Este es el término con el que los angloparlantes denominan a esos días en los que el pelo no coopera, hagas lo que hagas resulta imposible disciplinarlo: "Si al levantarte descubres que te has despeinado demasiado llegando a coger alguna forma que nos horroriza, eso tiene fácil solución, ya que no te llevará mucho tiempo conseguir el peinado deseado", apunta Esther González, quien continúa diciendo que "en lugar de levantarte, maquillarte y pasar horas ante el espejo peinándote para ir perfecta, este look te permite ir más natural. Además, en la ducha, sábanas o ropa no encontrarás pelos por todos lados".
4. Se adapta a todas las facciones
A pesar de lo arriesgado que pueda parecer, lo cierto es que si se encuentra la forma perfecta es apto para todas. Eso sí, Paul Tudor, responsable del salón David Künzle Fuencarral, admite que "se adapta a todo tipo de caras, aunque mejor en mujeres de cuello largo y baja estatura o de rostro redondo si se tiene volumen en la parte posterior. Para mantenerlo perfecto, habría que pasarse por la peluquería entre cuatro y seis semanas máximo. Lo mejor, peinarlo con una jalea corporizante en cabellos finos, y para cabellos más fuertes una leche (lait) de peinado, que fijamos luego con cera o laca". Por otro lado, si tu preocupación es si funcionaría con pelo rizado, Raquel Saiz, de Salón Blue by Raquel Saiz, no lo duda: "Los pixies o su versión más larga, bixie, favorecen muchísimo al rizo, incluso con flequillo. Los bucles añaden una nueva personalidad a este corte que se ve mucho más fresco cuando llevan onda".
Y por último, desde Menta Beauty Place recuerdan que "el pelo crece muy rápido y, una vez corto, podemos visitar más a menudo a nuestro estilista para ir jugando con diferentes largos, estilos, incluso colores. Si tienes seguridad en tí misma y eres decidida ya tienes el requisito esencial para cambiar de look siempre que quieras".