El look de belleza de Emily Ratajkowski se ha convertido en uno de los más imitados porque, a pesar de ser sencillo, consigue realzar los rasgos con un acabado universalmente favorecedor. Una de las claves de su ritual es el colorete, el producto rejuvenecedor por excelencia que la actriz utiliza con una técnica muy personal. También las cejas, que siempre lleva peinadas y fijadas hacia arriba para que no se muevan en todo el día. En sus últimas apariciones públicas, la actriz incluye un paso que sustituye su icónico maquillaje en tonos cobrizos: el lápiz de ojos negro. Con este color, Emily rodea todo el contorno de la mirada con lo que se consigue el efecto óptico de unos ojos más blancos, un rasgo que los demás perciben como atractivos.
Los ojos se convierten en los protagonistas absolutos de los últimos looks de Ratajkowski, en los que apuesta por el negro en menor o mayor intensidad. La tendencia de delinear toda la mirada de un color oscuro estaba de moda en los noventa, década en la que las supermodelos popularizaron este gesto de maquillaje. Además de intensificar y dar profundidad, según la ciencia, esta técnica también consigue que los demás te vean más atractiva porque hace que los ojos parezcan más blancos.
En un estudio desarrollado por la Universidad de Maryland, se descubrió que aquellas personas con la esclerótica (parte blanca de los ojos) amarilla o enrojecida, eran percibidas como desanimadas y menos atractivas. Por el contrario, las más claras son las que generan una sensación de belleza mayor en los demás. Los investigadores llegaron a la conclusión de que el color de esta parte de los ojos revela mucho sobre el estado emocional y la salud de la persona: “Los estándares de belleza varían según las culturas, sin embargo, la juventud y la salud siempre están de moda porque están asociadas con la aptitud reproductiva”.
Según la forma de los ojos, se puede adaptar la técnica para conseguir diferentes resultados. Los expertos coinciden en que aquellas que los tengan pequeños tan solo deben aplicar el lápiz negro desde la mitad hacia el exterior de la línea de agua para que no parezcan aún más reducidos. Por el contrario, las que los tengan grandes pueden permitirse llegar hasta el lagrimal. ¿El toque final? Aplicar máscara de pestañas tanto en las superiores como en las inferiores, tal y como hace Emily.