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Emily Ratajkowski ha encontrado el look de maquillaje que más le favorece. Su ritual personal incluye un ligero ahumado en tonos tierra para intensificar la mirada, aplicar una crema de farmacia en sus labios que logra ese aspecto jugoso tan característico y, por supuesto, una buena dosis de colorete. Emily ha dicho en varias ocasiones que el blush es uno de los productos favoritos de su neceser, un cosmético con el que consigue que sus mejillas parezcan aún más redondeadas. Por ejemplo, en su último evento en París, en el que la modelo demostró lo favorecedor que resulta este toque de color, un simple gesto con un poder rejuvenecedor instantáneo.
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Unas mejillas sonrosadas se han asociado desde siempre a juventud ya que, con el paso del tiempo, la piel pierde color y se vuelve más apagada. Emily conoce a la perfección el potencial de este ‘efecto óptico’ que hace que las mejillas parezcan rellenas: utilizar fórmulas con un brillo nacarado justo en el centro del moflete para que refleje la luz. Las fórmulas líquidas o en crema son las preferidas de Ratajkowski, una opción ideal para el verano por tratarse de texturas que se funden perfectamente con la piel.
Para aquellas con pieles bronceadas como la de la celebrity, los tonos melocotón son ideales para complementarla; las más claras deben decantarse por los rosados; y, por último, las de piel oscura pueden apostar por los más intensos para esculpir las mejillas. Cuando se encuentra el color perfecto, el modo de aplicación no puede ser más sencillo pues tan solo se necesitan las yemas de los dedos para difuminar el producto con suaves toquecitos.
© Cordon PressEl stick con cepillo incorporado de Nudestix es el preferido de Emily, pero se pueden encontrar más opciones que consiguen un efecto exacto al de la modelo: Illuminator en el tono Orgasm de Nars, uno de los colores más emblemáticos de la marca; Beach Sticks en el tono Formentera de Charlotte Tilbury; o el Stick efecto buena cara natural de la colección Les Beiges de Chanel.
