Es el color más solicitado en los salones de peluquería españoles: un 49% de las encuestadas quieren ser rubias, y celebrities como Emily Ratajkowski o Kaia Gerber han confirmado recientemente de que es un tono que no pasa de moda, a pesar de que requiera muchos cuidados extra, sobre todo cuando llega el verano. Hay expertos que recomiendan prestarle atención ya unos meses antes a este tipo de cabellos y comenzar a darle mimos allá por primavera. "Para que los rubios sobrevivan al verano lo ideal sería que antes, en torno al mes de abril, se empezara a bajar la intensidad del rubio –que sea más oscuro- porque durante el verano la exposición solar, el cloro y el salitre ya aclaran el cabello", afirma el peluquero Eduardo Sánchez, quien incide en que hay que extremar los cuidados en el caso de los rubios dorados y miel, que son los que más se aclaran y tornan hacia tonos indeseados. Pero si te ha pillado el toro y estás a punto de marcharte de vacaciones sin esa visita previa a la peluquería, tenemos la guía definitiva para que los días de playa y piscina no pasen factura a tu melena rubia.
LEE TAMBIÉN: ¿Quieres aclarar tu pelo sin decolorarlo? Prueba estos productos
"Los rubios beige y platino sobreviven mejor, porque el verano los potencia", afirma Eduardo Sánchez. “Una melena decolorada requiere de cuidados profesionales y específicos, pero si encima añadimos el cloro de las piscinas que tanto frecuentamos en verano, es cuando comienzan a venir clientas con un caos de cabello al salón”, añade el estilista Isaac Salido basándose en su propia experiencia. Y es que no es lo mismo un rubio natural que uno obtenido con coloración. “Debido al fuerte proceso de decoloración al que se somete el cabello, los tonos rubios son mucho más frágiles, ya que se debilitan y tienen una sensibilidad más marcada.
Por todo ello es imprescindible cuidarlos y nutrirlos los 365 días del año, pero si hablamos del verano y sus rutinas (exposición solar, salitre, cloro de piscina...) la cosa se pone más seria”, nos cuenta Salido. Y es que uno de los mayores problemas a los que se enfrenta el pelo rubio es la coloración verdosa que puede adquirir en los meses de verano. Tal y como nos cuenta Isaac Salido, el cabello puede haber sufrido un daño a nivel estructural y composicional profundo, lo que hace que se vuelve más poroso, facilitando la penetración de los compuestos químicos que se encuentran en la piscina y potenciando así la retención de este compuesto de coloración azul. “Los reflejos no aparecen de inmediato sino tras varios lavados, que es cuando estás perdiendo la coloración. Y como todos sabéis, azul con amarillo es igual a verde”, explica el peluquero.
LEE TAMBIÉN: La puesta a punto que necesita tu pelo para sobrevivir al verano
El ritual perfecto del pelazo rubio
Además, Eduardo Sánchez nos propone una rutina de belleza que tenemos que seguir para mantener el color lo mejor posible. "Primero utilizando champús, mascarillas o acondicionadores con pigmentos que mantengan el color vivo y eviten tonos indeseados como el nuevo lanzamiento de Leonor Greyl Soin Repigmentant, que tiene tres colores para los diferentes tonos de rubio", nos dice. E insiste en la importancia de la hidratación y reparación del cabello. "Mi recomendación es aplicar una vez por semana como mínimo una mascarilla en seco. No importa tanto el tiempo de exposición –bastaría dejarla 10-15 minutos-, como hacerlo en seco antes de lavar el cabello, porque el agua impide que el producto penetre en la fibra capilar y no sirve para nada. Después de aplicar la mascarilla, lavar el cabello de forma habitual. Y no separarse de los aceites capilares", nos cuenta.
"Desde mi experiencia profesional apostaría por tratamientos capilares que contengan propiedades antioxidantes, reparadoras e hidratantes ya que son las más eficaces para evitar el deterioro del color así como restarle calidad al cabello”, explica Morán, responsable de la línea capilar Naturalmente, quien recomienda la línea Breathe Suntherapy de la firma.
¿Y el sol? Como ha quedado claro, estamos ante uno de los mayores enemigos del pelo en esta época, que "afecta en mayor medida a los cabellos claros, ya sean naturales o teñidos, en este segundo caso todavía debemos hacer mayor hincapié”, nos explica Marina Morán. Es fundamental protegerlos del astro rey, "tanto con el uso de sombreros como de productos de protección que creen una barrera de protección eficaz contra el sol, la sal y el cloro y que revistan la fibra capilar con su propio 'escudo', que evite que se pierda tanto la hidratación interna como su color", nos dice el director de Maison Eduardo Sánchez.
LEE TAMBIÉN: Protectores solares para el pelo: por qué debes usarlos aunque no vayas a la playa
Teñirse antes de las vacaciones, ¿sí o no?
Nos surge otra pregunta: ¿es un error teñirse justo cuando empieza el verano? “Rotundamente no”, nos contesta Alex Sestelo, quien añade que cada cabello requiere y exige unas necesidades, y en muchos casos, debido a un crecimiento rápido, las citas de color son más seguidas que en personas con un crecimiento de cabello más lento. Matiza, eso sí, que “el único factor a tener en cuenta es saber la tonalidad que el cliente quiere conseguir, ya que por norma general cuando llega el verano aumenta el tiempo de exposición solar y por lo tanto el cabello siempre se va a aclarar de manera natural”. Por eso, nos explica que en su salón, el equipo de coloristas siempre opta por matizar el cabello en esta época para evitar un posterior tono anaranjado y mantener el rubio deseado. “Una vez teñido, sí que me gusta destacar la necesidad de hidratación que nuestro cabello va a necesitar. Es importante ser constantes y mantener una rutina de cuidado y saneamiento capilar. Por lo tanto, cuanto más sano esté el cabello, más podremos prolongar sin alteraciones el color”, nos cuenta.
¿Existen pautas preventivas para evitar problemas? Así lo cree Alex Sestelo, quien insiste en la importancia de la hidratación, pues el cabello cuando está más seco y debilitado se vuelve vulnerable a cambiar de color. También hay que “proteger la melena mediante protectores solares o mascarillas densas ricas en aceites para evitar la adhesión del químico, y reducir al mínimo el uso de herramientas de calor como son el secador, las tenacillas o plancha ya que los folículos de tu cabello se mantienen cerrados y no permiten la entrada de sustancias dañinas”. Por último, recomienda lavar el cabello lo antes posible al salir de la piscina para evitar la totalidad de absorción de químicos y “resetear” el cabello.