Cuando se trata de un evento nocturno, maquillaje y peinado son dos de los ingredientes fundamentales para que tu estilismo deje huella. Elegir el adecuado es más complicado de lo que parece ya que hay que tener en cuenta diversos factores como el tono de nuestra piel, el color de pelo y el tipo de vestimenta. Jennifer Lawrence ha lucido en los BAFTA un maquillaje elegante y sencillo perfecto para lucir por la noche pero que también puede servirnos para el día. La actriz ha seguido la regla del “cuanto menos, mejor” y ha dejado claro que no hace falta invertir horas y horas delante del espejo para destacar nuestras virtudes. Con los labios en rojo, una mirada suave y el cutis trabajado Lawrence tiene el look para esos días en los que sales de casa por la mañana, tienes una cita por la noche y has de elegir un maquillaje que te sirva para ambas situaciones. Te damos las pautas para que aciertes y no caigas en el exceso.
Para un maquillaje 24/7 elige una parte del rostro a destacar
Si quieres seguir el ejemplo de Lawrence y lucir un look que te sirva para las 24 horas del día lo primero que tienes que hacer es seleccionar la zona de la cara que quieras acentuar, los ojos o los labios. Aunque por la noche puedes lucir ambos sin problema, si sales de casa a las 9 de la mañana para ir a la oficina con unos elaborados smokey eyes además de que cuando pasen unas horas te lo tendrás que retocar, cometerás el error que se intenta evitar desde el principio, resultar excesiva. El labial rojo es la elección acertada para lucir sofisticada. Si quieres que te dure todo el día intacto, además de elegir una barra de larga duración sigue este pequeño truco: cuando bordees los labios con el perfilador coloréalos como si se tratase de un lienzo y aplica después el color con la barra, durará mucho más.
Piel de porcelana gracias al agua termal
El cutis es la otra parte que tendrás que trabajar en este tipo de estilismo. Aplica iluminador en pómulos, mentón y debajo del arco de la ceja para lograr un efecto “buena cara” y finaliza con polvos traslúcidos para evitar los temidos brillos. Si eres rubia elige un tono melocotón para las mejillas, para las morenas, mejor los rosas. En los ojos, aunque no se vayan a aplicar sombras oscuras ni eyeliner sí que favorece un color ‘nude’ o bronce en el párpado superior como lleva la actriz. La clave de este look es que la piel se vea saludable y con luz propia por lo que cuando termines lo mejor es que pulverices el rostro con un poco de agua termal, que además de darte un aspecto jugoso te ayudará a sellar el maquillaje.