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Las redes sociales se han convertido en el medio de comunicación preferido de las ‘celebs’. En ellas anuncian sus compromisos, embarazos, presentan a sus hijos, muestran sus viajes alrededor del mundo y, de vez en cuando, rememoran viejos recuerdos a través del hashtag ‘#tbt’ (throw back thursday).
Hace unos días, Jessica Biel subía a su cuenta personal de Instagram una fotografía que muchas habrían guardado bajo siete llaves. Una imagen en la que la actriz aparece en la alfombra roja de la ‘première’ de Halloween H2O: Veinte años después, estrenada en 1998.
No solo llama la atención el ‘look’ desenfadado de la mujer de Justin Timberlake -en los noventa parecía que las licencias estilísticas de las actrices a la hora de acudir al estreno de una película eran mucho más permisivas-, sino también una llamativa marca de bikini en el pecho de la estadounidense con la que ni siquiera ella ha podido evitar echarse las manos a la cabeza. “Echando la vista atrás a la época en la que los accesorios más cool de la temporada eran las marcas del bikini y un conjunto de confusión general”, escribía junto a la imagen.
Despeinada, apenas sin maquillar y con un ‘outfit’ compuesto por un pantalón vaquero con un ligero toque de brillo, así como un cuerpo con escote palabra de honor tornasolado, el aspecto de la actriz es realmente impactante. Sin embargo, Jessica ha sabido reírse de sí misma publicando esta llamativa imagen, que no deja de acumular likes en su cuenta de Instagram.
Lo que a muchos podría parecerles un garrafal error de estilo, para Jessica era una absoluta tendencia, que, repasando archivo, vemos se repite con el paso del tiempo. Eso sí, de manera mucho más sutil.
El estilo de Jessica Biel fue evolucionando, igual que la moda, a lo largo de los años. Su forma de vestir mejoró notablemente y, los complementos, fueron poco a poco sustituyendo a ese “accesorio” tan antiestético del que presumía hace 20 años.
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