No, no se trata de ninguna fórmula milagrosa, ni siquiera de un recogido enrevesado con efecto lifting; no nos referimos a un producto cosmético para el cabello ni tampoco a un acabado que te exija ser la aspirante a peluquera más mañosa. ¡Sorprendente, pero cierto! Hablamos de 7 peinados híper cómodos, sencillos y que probablemente ya has lucido sin esfuerzo en alguna ocasión. Todo un abanico de fórmulas que, sin que tú llegases a ser consciente de ello, consiguen rejuvenecer tu aspecto al instante. Detalles tan simples como dónde lleves delimitada la raya, cómo te seques el cabello o qué acabado tiene tu coleta cada vez que te la haces pueden dar un giro radical a tu aspecto y hacer que parezcas mucho más joven.

¿Preparada para quitarte años de encima? ¡Toma nota!

CON RAYA AL MEDIO Y ONDAS LIGERAS

La actriz Penélope Cruz parece haber anotado todas las fórmulas que funcionan a modo de “elixir antienvejecimiento”. Por una parte, los peinados con raya al medio lograrán que tu estilo sea mucho más juvenil y desenfadado. Además, el hecho de dividir tu cabellera a la mitad permite esconder alguna que otra arruguita, así como afinar el rostro. Por otro lado, hacerte unas ondas suaves con efecto natural potenciarán tu belleza y te rejuvenecerán ipso facto. Por último, si existe un corte que no ha dejado de estar en boga y que promete restarte años al instante, es precisamente el long bob. La melena midi resulta de lo más favorecedora y además, te permitirá quitarte un lustro de encima.

SÍ, AL FLEQUILLO

El flequillo, en cualquiera de sus versiones, siempre estará asociado a ese aspecto aniñado de nuestra infancia, quizás por eso mismo sea otra de las fórmulas antienvejecimiento más efectivas. Además existen infinitas versiones, desde el extremadamente geométrico, pasando por el ladeado o el flequillo abierto al centro. Para más bondades, se presentan como la herramienta más útil para enmarcar nuestro rostro, suavizar las facciones y, en más de una ocasión, disimular la frente visualmente. Por si fuera poco, tienen el don de, en un simple gesto, transformar completamente nuestro look y dotar de carácter personal a nuestra melena. No nos extraña que la bellísima actriz Monica Bellucci no se desprenda de él.

QUÉDATE A MEDIAS

El half-up bun ha sido el auténtico protagonista del verano y, sin duda alguna, uno de los peinados más socorridos de puertas para adentro. Porque, ¿quién no se ha hecho este semirecogido mientras trabajaba para que el pelo no le incordiase? Pues bien, el peinado más funcional y desenfadado —apto además para todo tipo de melena y corte de rostro—, conquista la calle y a mujeres como Julianne Moore, sabedoras de su poder a la hora de restar años. ¿Y en qué consiste? Pues básicamente en un semirecogido de lo más relajado, terminado en un moño a la altura de la coronilla.

Entre sus premisas fundamentales, cabe recordar adaptar la altura del moño al corte de la cara. Si tienes el rostro alargado nada mejor que colocar el moño a la altura de la coronilla y dar volumen a los mechones laterales —lo mismo que si tienes el cabello demasiado fino—. En caso de que tu cara sea más redondeada, súbelo a la parte más alta de la cabeza con un acabado tirante. Y si eres de las que luce un rostro ovalado, cualquiera de las dos será factible.

EL MOÑO ‘TOP KNOT’

Todas las mujeres tenemos como objetivo lucir perfectas en cuestión de minutos, de tal forma que el tiempo que invertimos en peinarnos sea inversamente proporcional al resultado ¡que ha de ser formidable! Pues bien, si hay un recogido exprés que nos salga de fábula es precisamente éste: el moño top knot o geisha. ¿De qué se trata? Pues básicamente de recoger el cabello en un moño que se alza estoicamente en lo alto de la coronilla. Desde luego, es práctico y cómodo hasta la saciedad. Eso sí, si lo que pretendes es quitarte años de encima, olvida las versiones pulidas y hazte con un moño undone al más puro estilo Jennifer Lopez. El resultado será deliberadamente imperfecto, con algún que otro mechón suelto, pero muchísimo más juvenil.

TRENZAS BOHO

Ya sea por sus múltiples declinaciones —romántica, punk, bohemia…—, las trenzas son, indiscutiblemente, uno de los peinados más versátiles, cómodos y juveniles de cuantos haya. Ese aire effortless que tanto la caracteriza, sumado a su sencillez y su capacidad de reinvención la convierte en una aliada imprescindible. De hecho, ya cuenta con embajadoras como Nicole Kidman, a quien vimos con una trenza clásica de tres cabos convenientemente ladeada. Lo cierto es que esta versión tan desenfadada conquistó la alfombra roja con su golpe de frescura y sencillez. Eso sí, su premisa fundamental será que tenga cierto aspecto deshecho, de tal forma que se desprendan de ella pequeños mechones. Así que, olvidaos de trenzas pulidas y aflojadlas ligeramente con las manos para obtener un aspecto más relajado.

LA COLETA ‘ANISTON’

La actriz Jennifer Aniston podría ponerle su propio apellido a esta coleta tan característica por la que se decanta en multitud de ocasiones. La intérprete deja atrás las coletas tirantes y los acabados pulidos para declinarse por una versión en la que el volumen en la parte superior es tan importante como el que alcanzará la propia coleta. Para ello, aplica una espuma voluminizadora sobre el cabello para, a continuación, secarlo boca abajo a la vez que lo mueves con los dedos. Una vez seco, puedes alisarla o proceder a realizar ondas con cepillo redondo y secador, o mediante planchas/rizador si te resulta más cómodo. Si optas por su versión ondulada, deshaz las ondas ligeramente con las manos boca abajo, haciendo que tu melena coja volumen. A continuación, carda levemente la coronilla y procede a hacer la coleta, dejando en el frente uno o dos mechones sueltos destinados a enmarcar tu rostro. El resultado será de lo más sexy y juvenil.

RECOGIDOS RELAJADOS

Definitivamente, si vas a recogerte toda la cabellera para un evento especial, o sencillamente para estar más cómoda en tu día a día, al menos que sea así. Nada de tiranteces ni de peinados incómodos, llévate esta foto de Julia Robets y hazte un moño exactamente igual que el suyo. Se trata de un recogido sumamente relajado, con volumen y que deja el flequillo suelto —delimitado al medio y ligeramente ondulado, para resultar todavía más favorecedor—. Recoge el pelo con la ayuda de las manos y obvia el cepillo, haz una coleta baja y enróllala hasta conseguir un pequeño moño que puedes asegurar con la ayuda de unas horquillas. Afloja las raíces y, en caso de que algún mechón se escape, deja que caiga libremente, resultará todavía más seductor.