Tendencias de belleza: Extensiones y pestañas postizas, ¿qué diferencia hay?

Tener unas pestañas XL se ha convertido en el objeto de deseo beauty de prácticamente todas las mujeres. Así, en muchas ocasiones, acabamos probando máscaras de pestañas que prometen alargarlas hasta el infinito o aportar mayor densidad, productos revitalizadores e incluso permanentes destinadas a que luzcan una curvatura natural. Sin embargo, existen técnicas y tratamientos que procuran simplificarnos la tarea al máximo, como es el uso de pestañas postizas para las ocasiones especiales, así como las extensiones de pestañas, diseñadas para lucir durante las 24 horas del día una mirada tan impactante como la de Blanca Suárez a la hora de pisar la red carpet. 

¿Quién no se ha fijado en más de una celebrity sobre la alfombra roja y se ha quedado anonadada con su mirada? Pues en algunos casos, su secreto reside precisamente en la perfecta colocación de unas pestañas postizas acordes con la forma de sus ojos, que se funden a la perfección con el conjunto.

Sin embargo, estamos hablando de una técnica efímera y destinada a un corto espacio de tiempo —una semana como mucho—, pero no de un tratamiento semi-permanente. Y es que, este tipo de pestañas se presentan en forma de tira o de pequeños grupitos con una banda o bolita de silicona donde se aplica un pegamento especial que no daña la piel. Debido a que han de ser adheridas, es recomendable que el ojo vaya maquillado para disimular su presencia. Del mismo modo, corres el riesgo de que puedan despegarse del párpado en el mismo día.

En cuanto a las recomendaciones, es importante optar siempre por pestañas de pelo natural, puesto que tendrán menos brillo y peso que las plásticas, aportando un aspecto más cuidado y menos artificial. Así también, destacar que esta técnica no supone ningún daño para tus pestañas naturales, siempre y cuando utilices un material profesional debidamente certificado. Entre sus beneficios también cuenta con que podrás despegarlas sin miedo y limpiar suavemente los residuos para volver al punto de partida, al no tratarse de un tratamiento con mayor durabilidad.

Las extensiones de pestañas están destinadas a agrandar e intensificar la mirada de una forma natural, sobre todo en el caso de mujeres que sufren escasez y necesitan más cantidad y volumen. Para ello, se adhiere una extensión hecha a base de fibra de seda, visón o polyester utilizando cianocrilato de etilo, un pegamento que no supone ningún riesgo para la salud de nuestros ojos. El resultado serán unas pestañas de aspecto natural, largas y curvadas.
El proceso es totalmente indoloro y semi-permanente, puesto que en ningún momento daña ni impide el crecimiento de las pestañas. El ciclo de vida de nuestras pestañas es de aproximadamente 6/8 semanas, por lo que los retoques serán necesarios pasadas las 2/3 semanas, rellenando aquellas zonas donde puedan haber calvas.