Los beneficios de nadar en agua fría: desde adelgazar hasta reducir los poros

Las olas de calor se intensifican más cada mes y los 30ºC nos parecen un paraíso en comparación a los cercanos a 40 que vivimos en los peores días. La solución pasa por mantenerse el máximo tiempo posible a remojo y lo mejor es que los suertudos con playa o piscina a mano, pueden convertirlas a ambas en una suerte de gimnasio/salón de belleza. Y es que, por lo visto, el agua fría ofrece impresionantes beneficios; algo que no nos extraña teniendo en cuenta el método Wim Hof que siguen Elle Macpherson y Kendall Jenner para imcrementar el rendimiento deportivo, reforzar el sistema inmunitario o dormir mejor. Aunque en ese caso no hablamos de inmersiones en hielo, sino de nadar a temperaturas bajas por sus propiedades a la hora de perder peso, reducir las imperfecciones o la apariencia de los poros. 

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Nadar adelgaza

Sin importar la temperatura del agua, nadar adelgaza y tonifica toda la musculatura con un enfoque global. De hecho, los expertos aseguran que es uno de los deportes más completos que existen, aunque existen disparidades según el medio en el que se realice el entrenamiento: "La principal diferencia es que el nado en piscina es más regular y lineal, mientras que, en el mar, el oleaje y las corrientes lo hacen más irregular, aunque también aumenta el esfuerzo. Sin embargo, en el mar hay que tener más cuidado a la hora de mantener la postura adecuada", explica Antonio Abellán, entrenador de Reto48. En cuanto al estilo que se elija, todos ayudan, aunque si lo que se busca es la quema de calorías los estilos a braza y mariposa son los más efectivos (1000 y 1200 calorías por hora, respectivamente). 

Sumergirse en agua fría

Aparte de los beneficios a la hora de perder peso que la natación tiene de por sí, cuando se hace a baja temperatura estos se potencian, así lo aseguran los expertos del centro de belleza Germaine Goya: "Nadar en agua fría puede aumentar el gasto calórico, ya que el cuerpo necesita quemar más energía para mantener su temperatura". Además, añaden que "el frío provoca la contracción de los vasos sanguíneos, lo que da como resultado una piel más firme y de aspecto revitalizado". 

'Efecto détox'

El verano es una de las épocas de excesos del año junto a la Navidad, por ejemplo; un momento en el que las buenas costumbres con respecto a una alimentación equilibrada se olvidan por unas semanas y se necesitan trucos para combatir la hinchazón resultante. Desde el centro Germaine Goya revelan uno muy eficaz: "La natación en agua fría estimula el sistema linfático, promoviendo la eliminación de desechos y mejorando la función inmunológica".

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Acción contra la celulitis

Aunque los famosos "hoyuelos" sean más que conocidos por más de un 90% de la población femenina y muy difíciles de eliminar por completo, llevar una dieta saludable y practicar ejercicio con regularidad ayuda a tratarlos. Del último punto, la natación es una gran aliada: "Estimula la circulación en áreas propensas a la celulitis, contribuyendo a reducir su apariencia y mejorando la textura de la piel", apuntan los especialistas del centro de belleza madrileño, desde donde añaden que "puede aliviar la inflamación de la piel y reducir la hinchazón en ciertas áreas del cuerpo". Como complemento, reducir el consumo de cafeína en pos de infusiones con propiedades drenantes ( cola de caballo, jengibre, ortiga, castaño de Indias, hinojo...) refuerza las propiedades de las rutinas bajo el agua.

Reducción de poros

¿Sabías que, en realidad, los poros no pueden reducir realmente su tamaño? El objetivo pasa por mantenerlos totalmente limpios para evitar la sobredilatación: "Nadar en agua fría ayuda a cerrar los poros dilatados, lo que disminuye la acumulación de suciedad y grasa en la piel y reduce la posibilidad de imperfecciones cutáneas", aseguran los especialistas de Germaine Goya antes de añadir que "provoca la contracción de los vasos sanguíneos, lo que da como resultado una piel más firme y de aspecto revitalizado". 

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Propiedades antiedad

Irina Shayk ha revelado en más de una ocasión que uno de sus trucos de belleza favoritos es el de masajearse la cara con hielo por sus supuestos beneficios antiinflamatorios. Lo que sí confirman desde el centro de belleza es que sumergirse en agua fría tiene un "efecto reafirmante" en la piel: "Estimula la producción de colágeno en la piel, lo que puede mejorar su elasticidad y firmeza, reduciendo la apariencia de líneas finas y arrugas". Además, "puede calmar la piel sensible y reducir la irritación causada por condiciones como el enrojecimiento o el acné".

Cura antiestrés

Es uno de los problemas más comunes en la actualidad y también el primer síntoma de enfermedades graves. Aprender a identificar el estrés o la ansiedad y actuar en consecuencia mediante mecanismos de relajación como sesiones de yoga o meditación es fundamental. La buena noticia es que la natación también ayuda a vaciar la mente de preocupaciones y, cuando se hace en agua fría, se consigue un efecto energizante muy placentero.  

Deporte universal

Por último, una de sus grandes ventajas es que la natación es un deporte apto para personas de casi todas las edades y capacidades físicas, porque el agua evita el impacto en las articulaciones, reduce los dolores de espalda (tanto cervicales como lumbares) e incluso es el tipo de actividad a la que recurren los deportistas lesionados.