Los días de calor son especialmente complicados para las pieles grasas, que ven cómo en verano se multiplican los antiestéticos brillos. Las altas temperaturas contribuyen a que las glándulas sebáceas se descontrolen, de manera que es muy habitual que, si tienes este tipo de cutis, veas cómo aparecen más granitos impurezas, un problema que aumenta debido a factores como el sudor y la humedad ambiental.
Por eso, existe un buen número de productos que tienen el objetivo de conseguir un efecto matificante, uno de los anhelos de este tipo de pieles. Prebases, polvos, bases de maquillaje, lociones e incluso cremas con factor de protección solar pensadas para las pieles mixtas y grasas. Todas ellas para poner punto y final a los brillos.