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Solo hace falta pararse en la terraza de cualquier bar para quedarse atónito con las creencias nutricionales de muchísima gente. “Estoy a régimen”, decía hace unos días una mujer de aproximadamente 40 años sentada a eso de las 12 de la mañana en una céntrica zona de Madrid. “¿Y por eso te traes todo eso envuelto en papel de aluminio?”, pregunta su amiga viéndola sacar su almuerzo de media mañana. A lo que la primera responde “es que cuando estás a dieta hay que comer cinco veces al día, yo antes hacía tres comidas pero ahora, estoy a régimen”. ¿Qué opinan los expertos de esta y otras tantas cuestiones relacionadas con la dieta que, a menudo, asumimos sin más?
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Hay que comer cinco veces al día ✗
Acerca de esta creencia concreta, la de las famosas cinco comidas al día, dice Salvador Ferrando, miembro de la Unidad de Endocrinología y Nutrición del Instituto Médico Ricart, que “las cinco comidas al día no son necesarias”. “Hay personas a las que su metabolismo le funciona bien con dos comidas al día”, confirma. “Según las condiciones fisiológicas de una persona y su estado de salud se establecerá el número de comidas que sean favorables a su metabolismo”, agrega.
Esta inquietud también se la encuentra frecuentemente en consulta la dietista- nutricionista Paloma Quintana, fundadora de Nutrición con Q. Ella asegura haber escuchado más de una vez eso de “he ganado tanto peso porque ni meriendo ni desayuno”. Lo desmiente de la misma manera que Ferrando. De esta forma, ambos expertos nos hacen ver que todo en nutrición ha de ser personalizado. Además Quintana apela también a “la incosciencia”.
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Nos dice que en cantidad de ocasiones ha oído decir eso de “yo es que no como nada y engordo”. “La gente no asume que no se mueve y come mal”, explica. Y es que, como trata de esclarecer por medio de su libro, Cocina, come y pierde grasa: Recetas deliciosas para una vida saludable, para perder grasa (que no es lo mismo que perder peso), hay que generar un déficit calórico, es decir, quemar más calorías de las que consumimos. ¿Cómo se logra esto? Llevando una alimentación equilibrada, un estilo de vida activo y practicando ejercicio físico. Podemos ser sedentarios aunque vayamos al gimnasio pero son los pequeños hábitos los que van sumando.
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Para verme mejor tengo que perder peso ✗
Otra de las cuestiones que en su libro aborda Paloma Quintana es la que atañe a la composición corporal. Habla de compartimentos para explicar qué es verdaderamente la grasa y explica que, para vernos mejor, no tenemos que centrarnos en perder peso sino en perder grasa. El músculo, dice, también pesa, y, sin embargo, cuanto más músculo tenemos más energía quemamos, incluso en reposo, para mantenerlo. Por eso, entre otras cosas, defiende a capa y espada la práctica regular de ejercicio físico como complemento esencial de una dieta sana y equilibrada.
El agua con limón en ayunas ayuda a adelgazar ✗
Cuenta la doctora Mar Mira, codirectora de la Clínica de Medicina Estética y Nutrición Mira+Cueto que el mito que más rabia le da es “el de las bondades y beneficios que se le atribuyen al agua con limón, tanto fría como templada”. “ Al agua con limón en ayunas se le atribuyen múltiples bondades. Se dice que adelgaza, que desintoxica o alcaliniza nuestros órganos. La realidad es que no existe una evidencia científica para la mayoría de estas afirmaciones”, dice la experta. Y desmiente esta creencia de la siguiente manera:
La combinación de agua con limón no entraña en sí misma una capacidad adelgazante, aunque si lo tomas antes del desayuno o la comida si puede tener cierto efecto saciante.
Tampoco implica una función detoxificante, nuestro organismo se depura de toxinas y sustancias metabólicas de desecho gracias al adecuado funcionamiento de los distintos sistemas excretores del organismo (hígado, riñón, sistema digestivo, piel…). Para detoxificar nuestro organismo no hay nada mejor que una buena alimentación basada en alimentos de origen natural, evitar tóxicos como el alcohol y el tabaco, e hidratarnos de manera adecuada para mantener las funciones celulares.
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Ahora bien, la doctora Mar Mira asegura que “lo que sí es una propiedad real atribuible al agua con limón, es la hidratación que proporciona, ya que al fin y al cabo es agua”. “Si eres una persona a la que le cuesta beber agua, una buena opción es preparar una botella de agua con un chorrito de limón, que actuaría como saborizante, meterla a la nevera e ir sirviéndola poco a poco a lo largo del día para alcanzar los requerimientos hídricos diarios”, sostiene. “Eso sí, es mejor beberla con pajita para evitar dañar el esmalte dental y no agregarle nunca azúcar u otros edulcorantes”, puntualiza.
El plátano engorda ✗
Este es, sin duda el mito, que “saca de sus casillas” a la dietista- nutricionista Gabriela Uriarte fundadora de Gu Nutrición. Bueno, este y, como ella misma nos ha confirmado “cualquiera que tenga que ver con las frutas o alimentos saludables”. Preguntada por cómo lo desmentiría, la experta nos dice que “es bien fácil”. “No hay mas que dedicar dos minutos a consultar las tablas de composición de alimentos, donde comprobamos que una manzana y un plátano son muy similares por no decir iguales en composición nutricional. Por lo que "engorda" lo mismo que una manzana”.
A esto hay que sumar que cantidad de personas hayan demonizado la fruta por el hecho de que lleva azúcar. Además de azúcar naturalmente presente (fructosa), las frutas llevan mucha fibra, antioxidantes y vitaminas que las convierten en alimentos indispensables para una dieta sana y equilibrada.
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Luz al final del túnel
Son muchos los mitos de nutrición que podríamos abordar. Véase por ejemplo el de que la finalidad de un ayuno intermitente es exclusivamente la de adelgazar. También muchas dietas milagrosas las que podríamos desmontar, siempre contando con el asesoramiento y aval de los especialistas. ¡Podríamos escribir un libro!
Pero queremos cerrar con un mensaje positivo. Por suerte cada vez contamos con más fuentes y solo tenemos que ocuparnos de escoger las más fiables. La ciencia va por buen camino y gracias a la labor de los nutricionistas y divulgadores (pese al creciente intrusismo que existe) cada vez hay más conciencia social de que la alimentación no solo es importante para vernos sino también para sentirnos mejor. Contar siempre con el consejo de un experto es crucial. Cuanto más sepas de nutrición, gracias a los nutricionistas, mejores hábitos llevarás y en menos tiempo del que imaginas, los asumirás como propios y no creerás haber sido capaz de hacer las cosas de otra manera.
