Abogada de profesión y artista de vocación, Elena Bau (Madrid, 1983) se ha ganado el apelativo indiscutible de fotógrafa de las influencers. Y es que ha sido testigo de los mejores momentos de reconocidas it-girls de nuestro país como Paula Ordovás, Marta Pombo y María Fernández-Rubíes. Tantos años de experiencia retratando mujeres fuertes han llevado a Elena a reconocer la belleza y la confianza a través de su lente, y sabe que no tiene nada que ver con un número. Mientras que ve fotos del pasado con dos amigas, Teresa Bellón de Aguilar (Madrid, 1978) y María Gijón (Madrid, 1982), la madrileña recuerda sus vivencias, su trayectoria, sus sueños… y admite que, con su actitud, no siente que tenga 36, porque es una persona activa llena de ilusión, con ganas de crear, de aprender y de vivir. Al final de la sesión, deja una reflexión para las mujeres de su generación: "¿qué edad tendríamos si no supiésemos la edad que tenemos?".
Llegamos al estudio de Elena Bau en en el madrileño barrio de Malasaña, un pequeño rincón lleno encanto en el que se respira pasión y buen rollo. Allí hablamos con la fotógrafa sobre cómo mantiene su piel llena de vitalidad, su rutina de skincare y algún consejo para salir siempre bien en las fotos. Elena nos revela que, tras largas noches de edición, duerme poco, por lo que su rostro muchas veces luce cansado. Sin embargo, desde que usa la nueva gama Cellular Boost, de Neutrogena®, siente mucha más confianza en sí misma porque frena los tres signos de envejecimiento cutáneo: las arrugas, el tono poco uniforme y la falta de elasticidad. Esta es una línea 100% pensada para mujeres como ella, que no se rigen por cómo se ven, sino por cómo se sienten.
¿Qué te hace sentir joven?
Creo que, con mi actitud, no siento la edad que tengo. Soy una persona muy activa, pero, sobre todo, tengo mucha ilusión y ganas por hacer cosas nuevas, por tener experiencias, por vivir. Y esa vitalidad me hace sentir joven, mis ganas por cuidarme tanto la piel, el deporte y la alimentación.
¿Cómo describirías tu actitud?
Positiva. Procuro estar bien siempre. Incluso cuando hay problemas. A veces me cuesta, pero siempre es mi premisa. La energía que tengo es emocional y eso hace que tire de mí pase lo que pase.
¿Y qué es para ti la belleza?
La belleza es armonía, es observar algo y quedarte absorto en ello.
¿Hay algo de Neutrogena® con lo que te sientas identificada? ¿Qué es lo que más te gusta de la firma de belleza?
Es una marca con base dermatológica y farmacéutica que cuida la piel a la vez que la trata, siempre teniendo muy en cuenta el respeto a la piel. Y me encanta que protege la sensibilidad del rostro. Creo que es una marca que genera confianza.
¿Qué resultados has notado con la línea Cellular Boost, de Neutrogena®?
Duermo poco y suelo tener la piel cansada, me encanta lo mucho que hidrata y cómo deja la piel jugosa, llena de luminosidad.
¿Cómo es tu rutina de belleza?
Tanto por la mañana como por la noche primero limpio mi rostro, me encanta sentir la piel limpia y fresca. Después me aplico el contorno de ojos, sérum o concentrado, y por último mi crema hidratante de día o de noche. Soy incapaz de salir a la calle o dormir sin mi rutina.
¿Qué es lo que más te preocupa de la apariencia de tu piel?
Que tenga luminosidad, y un aspecto saludable.
¿Cuál es el mejor consejo para salir bien en una foto?
Ser natural, sentirte cómodo con el fotógrafo es fundamental. Y ser tú mismo.
¿Cuál es el primer recuerdo que tienes de acercamiento a la fotografía?
Mi padre siempre quiso inculcarnos actividades creativas, de pensar, de hacer. Él tenía cámaras analógicas, siempre revelábamos las fotos y hacíamos un álbum de cada año en la familia. Tengo uno por cada año de vida. Yo sigo con esa tradición tan bonita y que me hace estar unida a él.
Agradecimientos. Fotógrafo: Javier Alonso. Estilismo: María Parra. Ayudante de estilismo: Danaé Clerempuy. Maquillaje y peluquería: Patrizio Niccolai y Juliana Izidoiro. Atrezzo: Decolab y Búcaro.