Como en casi todo, también en la alimentación sana hay tendencias y modas. Escuchamos maravillas de cierto alimento, lo incluimos en nuestra dieta creyendo que hacemos bien... y, sin embargo, nos hacen un flaco favor cuando llega el temido 'momento báscula'. “Hay alimentos que popularmente creemos que son estupendos en nuestra dieta, a los que damos vía libre y que, en cambio, engordan”, nos explica la doctora Mar Lázaro, experta en nutrición. Son lo que el doctor Leo Cerrud, ha bautizado como alimentos fake. “Se trata de aquellos que se nos presentan como saludables o que 'no engordan'; o los tenemos en la conciencia colectiva como que se pueden consumir sin límite, por lo que su uso se dispara 'justificada' e indiscriminadamente. Cuidado, el truco está en consumirlos durante la dieta pero sin abusar, básicamente como todo en la vida”, nos cuenta el nutricionista. Pero, ¿sabes cuáles son?
Lee también: Comer 4 aguacates al día como Victoria Beckham, ¿un buen hábito?
- Alimentos con etiqueta light, bajo en grasa o sin azúcares. “Cuidado, porque a menudo introduce bajo en grasa pero es alto en azúcares, o al revés, ocurre mucho con las salsas y con algunos postres y yogures. Además, solemos pensar que podemos tomar la cantidad que queramos al ser light, y es un peligro añadido para nuestra línea”, explica la doctora Lázaro.
- Hortalizas que se toman como snacks, “como las patatas fritas aunque sean light (siguen teniendo hidratos y mucha sal)”, añade Mar Lázaro.
- Aguacate y otras frutas. “Ojo, porque hay ciertas frutas que tienen muchos hidratos de carbono: plátanos, uvas, higos, aguacate, que es una fruta muy de moda pero que tiene muchos carbohidratos”, cuenta la doctora Lázaro. “A pesar de que son ricos en grasas monoinsaturadas, que son super sanas para el sistema cardiovascular, tiene un alto contenido calórico y no es recomendable en exceso para personas que quieren bajar de peso. 100 gramos de aguacate tienen ¡160 calorías!”, añade por su parte la doctora Mar Mira, médico estético y nutricionista de la Clínica Mira + Cueto, que sugiere como sustituto la pechuga de pavo.
- Zumo de naranja. “Para hacer un vaso de zumo natural se usan 4 naranjas. O sea, tenemos calorías de 4 naranjas en un vaso de 200 ml. Además, al hacer zumo eliminamos casi todas las fibras, lo que hace que la absorción de los azúcares sea muy rápida, causando un pico de glucemia y luego de insulina en la sangre”, nos cuenta la doctora Mar Mira, que recomienda como alternativa comer una naranja entera, que sacia mucho más, tiene fibras y muchas calorías menos. “Los zumos concentran una enorme cantidad de azúcar. Si los tomamos de noche, aún es una bomba mayor”, cuenta el doctor Cerrud, que recomienda también tomar la fruta mejor por la mañana, “para convertir los hidratos de carbono y el azúcar en energía”.
- Aceite de oliva. “Porque sea en crudo no deja de ser una grasa, y engorda igual. Lo mismo ocurre con la margarina, aunque sea vegetal: siempre será preferible el aceite en pequeñas cantidades”, reconoce la doctora Lázaro. "Hay alimentos que consideramos supuestamente inocuos, como el aceite de oliva, el aguacate, los productos lácteos, el tofu... Todo ello engorda, por sano que sea. Hay que consumirlo en su justa medida, y los lácteos, en su versión desnatada", matiza el doctor Leo Cerrud.
- Barritas de cereales. “Pese a que las venden como súper sanas, suelen contener alto contenido en grasas e hidratos de carbono (o sea, azúcares). Una barrita puede llegar a ¡200 calorías!”, concluye la doctora Mira, que propone en su lugar tomar frutas naturales o un puñado de frutos secos (grasas sanas, proteínas, vitaminas y minerales).