Patry Jordan nos cuenta cómo puedes transformar tu cuerpo en solo 21 días
La videobloguera y creadora de 'Gym Virtual' explica a HOLA.com las claves de su nueva guía de entrenamiento, dieta y motivación
Entrenamiento, dieta sana y descanso son las claves que todo experto señala cuando se le pregunta sobre un plan para ponerse en forma. ¿Y qué hay del factor motivación? A veces relegado a un segundo plano, el ingrediente psicológico es tan importante como los otros tres. Y precisamente este es el foco del nuevo proyecto la videobloguera e influencer Patry Jordan. Tras 5 años animando a una comunidad virtual de 6 millones de personas -los seguidores de su canal Gym Virtual en YouTube- a cuidarse, la catalana lanza Yo puedo con todo (Editorial Planeta, 19,90 euros), una guía para "transformar tu cuerpo en 21 días". ¿Es posible lograr un cambio real en solo 3 semanas? Patry Jordan afirma que sí, siempre que partamos de estar verdaderamente motivadas.
Patry Jordan ha hecho deporte desde que era una niña: "Mi madre tenía un gimnasio y yo daba clases allí desde los 16 años". También la alimentación sana es algo natural en ella, quien confiesa que, a pesar de que le gustan mucho los dulces, nunca ha sido de "comidas copiosas" y las frutas y verduras son la base de su dieta, desde hace años vegetariana. Sin embargo, es plenamente consciente de que no todo el mundo tiene la suerte de haber crecido con este estilo de vida y de que para muchas personas cambiar sus hábitos por otros más saludables es realmente complicado. Para todas ellas, "para quienes han fracasado intentando ponerse en forma antes", Patry Jordan lanza esta guía cuyas claves principales desvela para HOLA.com.
¿Qué significa el título, Yo puedo con todo?
Es el lema de mi comunidad virtual, que desde hace años comparte sus progresos con el hashtag #yopuedocontodo o #ypct. Es una afirmación que para mí tiene mucha fuerza, pero además debe ser un “yo puedo con todo” real. No creo en dar aliento a la gente en vano, sino en que de verdad sepan que pueden con todo... si están dispuestos a poder: yo puedo si verdaderamente quiero, con esfuerzo, con sacrificio, si me levanto a las 7, etc. Es comprometerte y vivir una vida consciente, pero encontrando la razón por la que debes hacerlo, que para cada uno será diferente.
¿Realmente es posible transformar el cuerpo en 21 días?
Tres semanas es el tiempo que necesita alguien para generar un hábito. Es verdad que para ver un cambio físico real necesitas tres meses, pero en 21 días puedes hacer un cambio de mentalidad completo, puedes hacer grandes cosas porque esos pequeños cambios construyen la base de un futuro diferente.
El libro plantea un programa de entrenamiento para esas tres semanas, ¿cómo es?
Va cambiando cada semana, pero siempre combina cardio y ejercicios de movilidad, además de un tiempo de calentamiento y otro de estiramientos, que también son muy importantes. Se trata de entrenar dos, tres o cuatro días, según el tiempo disponible porque es un plan que puede personalizarse según las circunstancias de cada uno. También la dieta puede adaptarse a cada objetivo y estilo de vida.
Los ejercicios de movilidad, son secuencias sencillas (inspiradas en sentadillas, lunges, planchas o flexiones) y no requieren ningún material, ¿por qué esta apuesta por lo simple?
Sin ser los típicos (porque son versiones diferentes), son ejercicios sencillos y sin peso externo porque con el del propio cuerpo podemos estar en forma y tonificadas. Parecen fáciles pero, si los haces adecuadamente, requieren esfuerzo y notarás el trabajo. Y es que a veces no hace falta hacer grandes cosas, sino hacer las cosas bien y de forma consciente. Además, son ejercicios que pueden hacerse en cualquier lugar. Yo, por ejemplo, como viajo mucho, a veces tengo que entrenar en el hotel y este tipo de ejercicios me lo permite.
¿Cómo te mantienes tú en forma?
Mi entrenamiento cada semana es diferente, por los viajes y los horarios, pero hay algunas reglas que siempre sigo y recomiendo:
- Nunca estoy más de dos días sin entrenar
- Si no tengo mucho tiempo, hago un ejercicio que sea intenso (como HIIT) durante 10 o 15 minutos
- Compenso: si hoy he comido mal, mañana comeré mejor; si hoy no me he movido mucho, mañana entrenaré más…
Al final hay que ser realista y no imponernos más limitaciones de las que ya existen en la vida. La clave es comprometerse con cosas que puedes cumplir. Si te pones metas demasiado elevadas y no llegas a ellas, te frustras y te sientes mal. Y esto puede aplicarse al entrenamiento pero también a la alimentación.
¿Cómo es tu dieta?
Yo no creo en las dietas, a menos que sean con un objetivo a medio plazo (como puede ser perder peso porque lo necesitas si tienes obesidad y quieres adelgazar para una meta como tu boda). Entonces sí tendrás que ser más estricto hasta que consigues ese objetivo, pero después tienes que hacer sostenible tu forma de comer, es decir, tienes que ir incorporando en tu día a día hábitos que te ayuden a estar sano: cambiar la manera de cocinar los alimentos, buscar alternativas más saludables, escuchar a tu cuerpo y ver qué alimentos te sientan bien o mal… Yo soy vegetariana y en general como bastante saludable; tomo muchos alimentos reales y siempre busco simplificar mi vida. Por ejemplo, si me resulta más práctico dejarme cosas hechas o congeladas, pues lo dejaré preparado. A mí me gusta comer, nunca paso hambre, pero nunca lo he hecho de forma copiosa y mal. Me gusta el dulce, eso sí, porque soy bastante emocional.
En el libro también hablas del hambre emocional, ¿por qué consideras que es tan importante?
Vivimos en una situación en la que creemos que sentirnos mal es normal, y no lo es. Hay mucha gente que coge peso porque no se siente bien. Por eso creo que es tan importante reencontrarte contigo mismo para encontrar el problema inicial. Si no lo radicas, ya puedes estar haciendo mil dietas que no van a poder con ese vacío o mal hábito.
El mayor error que podemos cometer cuando queremos ponernos en forma…
Querer hacerlo todo ya y esperar resultados inmediatos. Además, no tenemos que ver el ejercicio por su recompensa física solo; trae muchísimos beneficios más: años de vida, más salud, más energía, menos estrés… Cada persona tiene que encontrar la razón por la que quiere practicar ejercicio o ponerse en forma porque solo así se comprometerá.
El mejor consejo que puedes dar…
Empieza ya con el plan, sin esperar al mejor momento porque nunca llega. Deja de decir "empiezo mañana que estaré mejor". Da lo que puedas dar en ese momento y ya verás cómo, más adelante, das mucho más. No pasa nada por hacerlo mal al principio, el problema es fallar todos los días. Y cuando no empiezas, estás fallándote todos los días. Tenemos que salir del victimismo y dejar las excusas para darnos cuenta de que podemos ser capaces de mucho más de lo que pensamos.