Lo queramos o no, los smartphones cambiaron nuestra vida. Ahora todos tenemos una cámara de fotos a mano, y las redes sociales se han convertido en un elemento fundamental de nuestras vidas. (Casi) todo es imagen, para bien y para mal. Por eso, en este mundo en el que los selfies y los filtros de Instagram están a la orden del día, no es extraño que hasta una disciplina médica que trata la imagen, como es la dermatología, haya tenido que adaptarse a las nuevas tendencias, impuestas por el uso de estas tecnologías que, quien más quien menos, ha incorporado a su rutina diaria. Los dermatólogos afrontan esta nueva era de las redes sociales observando cómo ha cambiado, en parte, el perfil de sus pacientes. Hay celebrities, como las hermanas Kylie y Kendall Jenner, que han convertido a su dermatóloga Christie Kidd en una de sus gurús de confianza. Sí, es cierto que ellas están expuestas constantemente a los focos, pero es ahí donde viene la pregunta… ¿y quién no lo está hoy en día?
Así, en los últimos años la dermatología como especialidad médica se ha reactivado como respuesta a la alta demanda social que solicita nuevos tratamientos para mejorar su apariencia física. Los dermatólogos José Maria Ricart y Adriana Juanes, directores médicos de Instituto Médico Ricart en Valencia y Ruber Internacional Paseo de La Habana en Madrid respectivamente, señalan que en sus clínicas han experimentado un crecimiento de pacientes que solicitan servicios de dermatología estética y medicina capilar. También cuentan que se trata de un perfil de pacientes exigentes que demandan las mejores técnicas para abordar todo tipo de alteraciones de la piel, además de mejorar su apariencia física, confiando en el especialista que mejor les puede ayudar. El doctor Ricardo Ruiz, director de Clínica Dermatológica Internacional, es uno de los expertos que más ha analizado cómo ha cambiado la perspectiva de la dermatología estética en los últimos años. Él mismo cuenta la anécdota de recibir en consulta a pacientes cada vez más jóvenes, de menos de 30 años que, además de preguntarle por asuntos relacionados con la piel, tenían un objetivo claro: mejorar estéticamente. Desde tener unos labios más gruesos a conseguir eliminar la arruga marcada del entrecejo o acabar con las ojeras.
Un aumento de las consultas ¿debido a los 'selfies'?
El doctor Ruiz cuenta otra experiencia en su clínica. “Hace unas semanas vino a mi consulta una chica de 19 años con su madre para mejorar las cicatrices de acné. Esto no tiene nada de particular. Pero lo curioso es que la chica me enseñó en su móvil una foto de cómo quería quedar. Se había realizado un selfie y había aplicado un filtro de forma que su piel aparecía lisa y luminosa, sin rastro de cicatrices. Yo la expliqué que con el láser fraccionado y con inyecciones de ácido hialurónico podríamos mejorar las cicatrices, pero nunca llegaríamos a conseguir el resultado que ella mostraba en la foto. La paciente no quedó muy convencida…”, nos cuenta.
Así, nos encontramos ante una tendencia totalmente nueva, en opinión del doctor. “Yo explicaba al padre de una de estas pacientes que la causa de estas inquietudes estéticas tan precoces la tiene las redes sociales. Nunca hemos estado tan informados sobre nuestras imperfecciones estéticas. Ahora los jóvenes se ven en los selfies, en las fotos de los chats, en Instagram, en Facebook, etc. Y por ello quieren mejorar su imagen. La Asociación Americana de Cirujanos Plásticos ha aportado la estadística de que las consultas estéticas han aumentado más de un 30% debido solo a los selfies”, explica el doctor.
La encuesta, realizada por la American Academy of Facial Plastic and Reconstructive Surgery (AAFPRS), apunta, entre otros datos, que el 58% de los cirujanos plásticos entrevistados refirieron un aumento del número de visitas de jóvenes de menos de 30 años para mejorar su aspecto estético. Un cirujano plástico constataba un cambio evidente: antes los pacientes acudían a la consulta con la foto de alguna celebrity, pero ahora la inspiración es un selfie retocado para que el cirujano vea cual es el resultado final deseado. “Con los smartphones nunca a lo largo de la historia la gente joven ha tenido un conocimiento tan minucioso de la imagen facial”, apunta el doctor Ruiz. Y no solo la gente joven, todos estamos preocupados por la imagen que publicaremos en nuestras redes sociales.
Algunos de los tratamientos más demandados
Lo que parece evidente es que los tratamientos de medicina y dermatología estética han dejado de ser coto exclusivo de pacientes que sobrepasan los 40. El doctor explica que, eso sí, en el caso de tratar un perfil de edad más bajo, es fundamental recurrir al sentido común. Unas marcas de acné, una nariz prominente o unas orejas de soplillo pueden ser una fuente de problemas de autoestima para un buen número de jóvenes, que no quieren sino verse mejor. Eso sí, es fundamental que los profesionales partan de expectativas reales con quienes acuden a pedirles opinión. “Con los nuevos filtros de las redes sociales en ocasiones los pacientes nos muestran los resultados que quieren obtener. Y debemos educarles en que la medicina moderna no hace milagros”, explica el doctor Ruiz. Pero ¿qué es lo que demandan los pacientes más jóvenes? En Clínica Dermatológica Internacional nos cuentan que se puede resumir en cuatro pilares:
- Corregir aspectos que les molestan, para verse más guapos: otoplastias (cirugía de orejas, común entre los pacientes más jóvenes), rinoplastias o rinomodelaciones (en la nariz) o retoque de labios.
- Todo lo que tiene que ver con la estética corporal: eliminar grasa sin cirugía (Coolsculpting), acabar con la celulitis (Cellfina) o tonificar abdomen/glúteos (EMsculpt).
- Problemas relacionados con el acné: por lo que nos confirman hacen bastantes limpiezas y tratamientos de Hydrafacial.
- Y en cuarto lugar, aunque en menor medida, se demandan tratamientos para prevenir el envejecimiento (botox) o la caída del cabello.
La clave, además, tal y como nos explica el doctor, es enseñar a esos pacientes jóvenes, tan marcados por la influencia de las redes sociales, sobre la importancia de la prevención. No hay que dejar para mañana el cuidado de la piel, tanto en los cuidados en casa como en centro de belleza. Y los doctores José Maria Ricart y Adriana Juanes nos dan además una nueva perspectiva sobre las redes sociales en su profesión: son una herramienta que da la opción de interactuar de forma directa con los pacientes a quienes pueden mostrar de forma instantánea resultados de casos reales de tratamientos y responder en tiempo real a todas sus dudas e incluso facilitarles una primera cita. "Se calcula que 7 de cada 10 pacientes buscan información sobre su salud en internet, y nosotros les ofrecemos nuestro método de diagnóstico y posible tratamiento", nos cuentan sobre el papel de las redes en su día a día laboral.
Una relación de confianza
Los especialistas de Instituto Médico Ricart confirman un crecimiento de más de un 30% en esta especialidad respecto al año anterior. El Doctor Ricart nos indica cómo cada vez más el paciente es más consciente del papel del dermatólogo como único especialista íntegro en el cuidado de la piel y el cabello: sus patologías y por extensión su envejecimiento, y en este sentido incide en el incremento de pacientes de todas las edades que buscan exclusivamente a este especialista porque es el único que puede garantizar una belleza saludable y natural.
Y todo ello tiene que partir de una relación de confianza con el dermatólogo. “Creo que los pacientes jóvenes pueden beneficiarse de mantener una relación periódica con un dermatólogo que tenga ojo estético”, cuenta el doctor Ruiz, quien explica que vemos normal acudir regularmente al dermatólogo para controlar lunares, alteraciones de la piel, pelo y uñas, por ser muy conveniente para la salud. “Si esa misma persona te acompaña a lo largo de los años a mantener y mejorar la calidad de la piel y te introduce de forma sensata en las técnicas no invasivas de dermatología estética, creo que se convierte en una relación muy fructífera para todos”, añade. “Los dermatólogos nos convertimos en auténticos coach de la piel”, apunta el doctor, "y tenemos una gran oportunidad no sólo de prevenir cáncer de piel o mejorar las distintas patologías cutáneas de nuestros pacientes jóvenes, sino también de asesorarlos estéticamente a lo largo de los años con rigor y sensatez".