Al contrario de lo que muchos puedan creer, el metabolismo no está determinado por la genética. Al menos, así lo defiende Haylie Pomroy, la nutricionista de estrellas como Jennifer Lopez o Reese Witherspoon. Pomroy asegura que hay algunos fallos dietéticos que pueden ralentizar la quema de grasa y ciertas soluciones para favorecerla. La mejor prueba del éxito de su método, recogido en el libro Metabolism Revolution, la encontramos en el espectacular físico de J.Lo., que a sus 49 años protagoniza decenas de titulares cada temporada sobre sus hábitos de ejercicio y alimentación. Sobre este último tema hablaba recientemente su dietista a la revista Well + Good en una entrevista en la que enumeraba los cinco grandes errores que juegan contra el metabolismo.
1. No leer los ingredientes de cada producto
Saber qué tipo de químicos incluye cada producto con el que se va a preparar un plato es muy importante porque muchos de ellos son edulcorantes artificiales, conservantes y colorantes que se cree que funcionan como disruptores de la actividad metabólica. La recomendación de Pomroy consiste en evitar en la medida de lo posible este tipo de productos y confiar en materias primas puras. Si no se pueden evitar, lo mejor es leer las etiquetas de los ingredientes y si incluye bastantes no reconocidos, volver a dejarlo en la estantería.
2. Obsesionarse con las calorías
“Comer menos empeora la situación. Cuando tu metabolismo es muy lento, incluso almacenarás una lechuga como grasa y no quemarás nada de esa grasa”, afirma. Por eso, Pomroy recomienda tomar algo cada tres horas, incluidos dos snacks saludables todos los días. Otra de sus claves consiste en desayunar media hora después de levantarse, o antes. Si no, se desencadena una situación de alarma en el metabolismo y se producirá cortisol, una hormona que le dice al organismo que empiece a almacenar grasa de inmediato “porque quién sabe cuándo tendrá más alimento”.
3. No variar el menú
Según la experta, no se debe acostumbrar al organismo a tomar los mismos platos una y otra vez. De hecho, algunas investigaciones científicas apuntan que cuanto más variada sea la dieta de una persona, menores serán las posibilidades de tener un exceso de grasa corporal o sufrir problemas de metabolismo. Por ejemplo, si se suele comer una ensalada a diario, lo mejor sería cambiar los ingredientes cada semana.
4. Confiar en dietas restrictivas
“Definitivamente no son efectivas porque tu sistema sensorial con respecto a la comida se estropea”. Por el contrario, cuando se disfrutan de comidas apetecibles, se estimula la secreción de endorfinas y el estrés hormonal se reduce, lo que mejora el metabolismo. Por eso, Haylie Pomroy anima a sus clientas a probar un trozo de pizza o unos tacos de vez en cuando y encontrar frutas, vegetales y proteínas sabrosas con los que crear platos atractivos para el día a día.
5. No elegir el entrenamiento adecuado
La experta recomienda mezclar cardio con ejercicios de fuerza y no olvidar la recuperación muscular. “El nivel de intensidad dependerá de tu nivel de fitness”. En cuanto a los dirigidos a tonificar los músculos, Pomroy explica que se debe elegir un peso con los kilos suficientes para completar la rutina y sentir los músculos exhaustos. Además, recomienda tomar un snack pequeño antes de entrenar; por ejemplo, una pieza de fruta.