Todas las veces que Ana de Armas fue Marilyn Monroe dentro y fuera de la pantalla

Ana de Armas ya es una estrella de Hollywood con mayúsculas y su nominación a Mejor actriz por su interpretación de Marilyn Monroe en Blonde es el culmen de un trabajo sublime que se ha visto reconocido en el evento más importante del séptimo arte. Aunque para el resto del mundo la cubana sea todo un hallazgo, nosotros la conocimos hace más de diez años como Carolina Leal Solís en El internado y, como vamos a comprobar a lo largo de esta selección de momentos beauty de su carrera, ha encarnado a la ambición rubia mucho antes de que se estrenara la película. Descubre la curiosa mueca que comparten ambas estrellas, las veces que ha centrado su maquillaje en el icónico labial rojo o cuándo ha sustituido su pelo castaño natural por el platino con el que recordamos a la protagonista de Los caballeros las prefieren rubias. 

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Ana de Armas como Marilyn Monroe

Como punto de partida hemos rescatado tres fotogramas de Blonde, la película que contaba con una gran expectación previa a su estreno por el impresionante trabajo de caracterización que transformó a la actriz en una réplica de Marilyn Monroe. El mismo pelo, los mismos ojos azules cuando en realidad los tiene de un verde avellana extraclaro y, por supuesto, el mismo maquillaje que a día de hoy se considera un clásico gracias a la apodada "ambición rubia". 

Trabajo de profesionales de maquillaje, peluquería y vestuario aparte, la razón por la que Ana de Armas ha sido nominada a nada menos que un Oscar es su interpretación de la nacida bajo el nombre de Norma Jeane Mortenson. Para quienes no hayan visto el largometraje de Netflix, fotogramas como este son prueba más que suficiente de que su transformación ha tenido mucha más profundidad que la meramente externa, además de la ovación de más de 14 minutos que recibió tras la presentación del filme en el Festival de Venecia. 

Y como última imagen de Blonde antes de pasar a las apariciones de Ana de Armas sin caracterización de ningún tipo en las que proyecta un halo que recuerda al de Monroe, te adelantamos que hemos echado la vista atrás hasta llegar incluso a 2012, pues diez años antes de que la cubana protagonizara la película que la llevaría hasta la cumbre del éxito, ya apuntaba maneras con su look, actitud e incluso cambios de look extremos. 

Labios rojos en los BAFTA

Es el color de labios que asociamos a Marilyn Monroe y veremos que Ana los lleva a menudo. Los últimos premios BAFTA celebrados en Londres fue una de las últimas, donde además lanzó un beso a los fotógrafos apostados en el photocall de The Royal Festival Hall, un gesto que la estrella de los años 50 repetía constantemente. 

Cejas arqueadas

Es un rasgo que a día de hoy se lleva lo más tupido y natural que sea posible, aunque en la época del Hollywood dorado la moda era afinarlas y pronunciar el arco hasta el extremo. Nuestras protagonistas también comparten esta característica y en el caso de Ana no hablamos de un cambio reciente, sino que luce el mismo grosor e inclinación ascendente desde que la conocimos en la pequeña pantalla junto a Blanca Suárez y Elena Furiase.

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Sonrisa en reposo

Además del vestido de Louis Vuitton con el que acudió al estreno de 007 No time to die que la convertía en una sex symbol como lo fue Marilyn durante toda su carrera, también posó con una mueca conocida como "sonrisa en reposo" que los expertos señalan como una razón importante por la que guarda tanto parecido con ella: "Hay un gran mérito en el maquillaje, el registro de la voz y el nivel interpretativo de Ana de Armas, pero poco se habla de la importancia que tiene la boca, los labios y la sonrisa en una caracterización de película biográfica, más aún si hablamos de una de las sonrisas más atractivas y cautivadoras de la historia de Hollywood como la de Marilyn Monroe", apunta la Dra. Eugenia Cervantes.

La doctora Cervantes continúa explicando el fenómeno detrás de este gesto que Ana de Armas realiza de manera natural desde que la conocemos: "Ya sabemos que la actriz llevó ortodoncia para alinear su sonrisa y carillas para perfeccionarla. Pero lo que pocos han notado es el parecido en la sonrisa de ambas con los labios en reposo, que es como Marilyn se muestra en muchas de sus icónicas fotos". 

En cuanto a sus características, la especialista en sonrisas del Hollywood asegura que, "si miramos atentamente, notamos que ambas tienen casi la misma exposición dentaria de los incisivos superiores (dientes centrales); tanto Marilyn como Ana de Armas muestran aproximadamente entre 4 y 5 milímetros, que es lo ideal cuando hablamos de una sonrisa notoria y bonita". De hecho, añade que, "en estética dental, el parámetro de una sonrisa femenina bonita es que, con el labio superior en reposo, los dientes se vean entre 2 y 5 milímetros". 

Es cierto que la estrella de cine repite una y otra vez el gesto de entreabrir ligeramente los labios para posar ante los fotógrafos como hacía Marilyn, una coincidencia com más importancia de la que parece: "Es curioso, pero el tercio inferior es una zona que en muchos casos puede revelar el parecido con otras personas, como familiares e incluso hasta con estrellas de Holywood", revela la doctora, quien no duda que "la sonrisa haya sido un elemento clave para que Ana de Armas se quede con el papel". 

'Sex symbol'

Ya hemos mencionado que algunos de los estilismos que la de La Habana elige para acudir a un evento, están especialmente pensados para realzar la innegable sensualidad que proyecta. En este caso, el vestido rojo que recuerda a los que Marilyn luce en muchas de sus películas (Cómo casarse con un millonario o Los caballeros las prefieren rubias), combina con el labial que también llevaba habitualmente la estrella, además del peinado con raya a un lado y melena ondulada. 

Y es que, comprobamos que una y otra vez elige el rouge como punto central de su maquillaje, un color que ha demostrado en estudios científicos que consigue que quien lo lleva atraiga la atención de quienes la rodean en comparación con otras tonalidades. Otro punto en común es el tono de piel, que no se broncea con ayuda de polvos de sol, sino que se centra en potenciar el rubor con un toque de colorete desde las manzanas de las mejillas hacia las sienes. 

Por encima del hombro

De espaldas y mirando hacia atrás con la cabeza apoyada sobre uno de los hombros, de Armas recurre a menudo a esta pose en las alfombras rojas que la estadounidense convirtió en uno de sus sellos ante los flashes. Aparte de una postura ideal para lucir la parte de atrás de un vestido o el peinado, también es de las más efectivas a la hora de "seducir a la cámara" y a día de hoy es un clásico entre celebrities como la propia Ana o Elsa Pataky, por ejemplo. 

Ana de Armas ya era Marilyn en 2014

Mucho antes de que nuestra protagonista diera el salto a Hollywood y se convirtiera en una de las estrellas internacionales con mayor proyección a nivel mundial, acudía al Festival de cine de Málaga para presentar Por un Punado de Besos con un estilismo claramente inspirado en Marilyn Monroe: vestido de escote halter, el corte bob rubio platino con las ondas al agua que arrasaban en los 60, el labial rojo y la icónica postura de espaldas con la cabeza mirando hacia atrás.

Su gesto de alfombra roja

Para terminar y aunque sabemos que mirar hacia atrás cuando posa ante los fotógrafos es una de sus posturas favoritas, nos quedamos con el beso a lo Marilyn que ha hecho suyo desde que triunfaba en nuestro país. Una pista de lo que estaba por llegar años después: la nominación al Oscar a Mejor actriz por interpretar a una de las estrellas más icónicas de la meca del cine.