Sus infinitas piernas son protagonistas y conectan con el diseño de Scandal, muy reconocible por su frasco en el que las piernas de la mujer ponen el broche sobre el perfume.
Para el diseñador esta fragancia es la esencia de las mujeres poderosas: "Siempre me gustaron las mujeres fuertes que no se molestan por los juicios de valor que la sociedad puede hacer sobre ellas”, reconoce Jean Paul Gaultier.