Victoria’s Secret Fashion Show 2018: el 'backstage' del desfile más esperado del año

La cita anual con la presentación de lencería más espectacular ha llegado, y si las alas, el Fantasy Bra o los artistas invitados al Victoria's Secret Fashion Show generan expectación, las modelos que participarán en él todavía lo hacen más. En la previa al desfile y desde el backstage, descubrimos cómo se preparan Adriana Lima, Romee Strijd, Bella Hadid y el resto de chicas para este colorido evento que este año se graba en Nueva York y se emitirá en televisión el próximo 2 de diciembre.

Elsa Hosk ha sido la elegida para llevar el Fantasy Bra, un lujoso sujetador que se reinventa cada edición. Este año, el diseño incluye más de 2.100 diamantes de Swarovski y está valroado en un millón de dólares (877.000 euros). Desfilar con esta pieza supone un reconocimiento que en ediciones anteriores recibieron, por ejemplo, Adriana Lima, Alessandra Ambrosio o Gisele Bündchen.

Kendall Jenner, igual que Bella y Gigi Hadid, era una de las últimas modelos en llegar al Piers 94, el pabellón situado en la 12ª Avenida de Manhattan donde se ha celebrado el desfile. Hoy volvía a la pasarela de Victoria's Secret tras debutar en 2015 y repetir en 2016 pero no participar en 2017.

No estaba claro que Adriana Lima, el ángel más veterano de todos, fuera a participar en el show de este año, puesto que la modelo no había hecho ninguna confirmación, al contrario que la mayoría de sus compañeras. Finalmente, la brasileña ha participado y minutos antes del inicio, HOLA.com ha tenido la oportunidad de entrevistarla en el backstage, donde nos contaba que este es su mejor año y adelantaba que el desfile iba a ser especial.

Bella Hadid, que hace unos días se enfrentaba a comentarios negativos sobre su cuerpo tras compatir una foto de la prueba de vestuario para el show, desfila por tercera vez para Victoria's Secret.

Su hermana mayor, Gigi Hadid, también lo hace por tercera, aunque debutó un año antes, en 2015. 

Behati Prinsloo era una de las modelos más esperadas este año, dado que las dos ediciones anteriores de Victoria's Secret Fashion Show coincidieron con sus embarazos y no desfiló. Este año, su amiga Lily Aldridge no ha podido participar por el mismo motivo, y Behati le mandaba un cariñoso mensaje a través de las redes sociales. "Te echo de menos", escribía en Instagram, donde la sudafricana también ha admitido que, a pesar de haber desfilado por primera vez hace más de una década, en 2007, estaba nerviosa.

Candice Swanepoel (derecha) es una de las modelos más icónicas de la casa: trabaja con Victoria's Secret desde 2010. Para muchas de las modelos, el desfile anual es un reencuentro con sus amigas y compañeros, o su familia, como a menudo se refieren a todo el equipo que trabaja en este espectáculo.

Fotos, selfies, vídeos... El backstage se convierte en un plató improvisado que adelanta los peinados y maquillajes que minutos después veremos sobre la pasarela. Stella Maxwell aprovechaba un descanso de las tenacillas para fotografiarse.

Winnie Harlow desfila por primera vez en esta edición. 

Taylor Hill, en su silla de maquillaje mientras la preparan con el look natural que Charlotte Tilbury, una de las preferidas de las celebrities y maquilladora oficial del desfile, ha creado inspirándose en Gisele Bündchen.

Megan Williams, que participa por tercera vez en este evento, es una de las cinco modelos inglesas seleccionadas este año.

La modelo tanzana Herieth Paul también desfila por tercera vez para Victoria's Secret. 

En el desfile de 2018 todas las modelos no han ido peinadas con las características ondas de los ángeles, sino que Anthony Turner, el director de peluquería, ha decidido destacar la belleza de cada chica y realzar la forma natural de su cabello. La estadounidense Aiden Curtiss, por ejemplo, lucía su característica melena rizada.

Durante las horas previas, Shanina Shaik también compartía a través de Instagram Stories cómo preparaba su piel y su manicura para el desfile... hasta que al llegar al backstage, ha desconectado del universo digital para rendirse a las manos expertas de la maquilladora Charlotte Tilbury y de su equipo.

Josie Canseco y Iesha Hodges, fotografiándose con el batín negro y glitter diseñado para esta edición del show.

El año pasado, HOLA.com entrevistó a Alexina Graham en la previa al desfile. La pelirroja repite para Victoria's Secret y se acerca un paso más a sus posibles alas.

Romee Strijd desvelaba a través de Instagram el resultado del peinado con rulos que llevaba en esta foto, mientras le hacían la pedicura.

Maia Cotton, con rulos y el batín oficial del backstage de este año. Es la segunda vez que esta modelo neozelandesa desfila para la firma lencera.

Kelsey Merritt es la primera modelo filipina que desfila para Victoria's Secret. Su fama ha crecido mucho desde que hace unos meses compartiera una foto en Instagram mostrando sus estrías y con el título: "Las estrías son sexy. Dilo conmigo". La naturalidad y el buen humor que se intuía en esa publicación lo ha demostrado hoy bromeando mientras la peinaban.

Mientras algunas modelos evitaban ser fotografiadas con rulos y sin maquillaje, otras lo hacían encantadas, como la húngara Barbara Palvin, en esta imagen.

Cheyenne Maya Carty debutaba esta noche para Victoria's Secret en el que posiblemente sea el desfile más inclusivo celebrado hasta el momento por la firma de lencería.

El maquillaje en esta edición ha sido más natural que en shows anteriores, siguiendo la tendencia que comienza a imperar en toda la industria de la belleza. "No será pesado ni con mucho contouring", adelantaba la maquilladora Charlotte Tilbury días antes. La piel ultraluminosa, como la de Devon Windsor, es la opción ganadora ahora mismo.

Entre maquillaje y peluquería, las modelos encuentran tiempo para relajarse, hacerse fotos y, sobre todo, pasarlo bien, porque este desfile más que una presentación de moda al uso es una celebración de la belleza.

El inconfundible beso con el que Adriana Lima y Alessandra Ambrosio han cerrado tantos desfiles, pasa año a año a nuevas generaciones de modelos que podrían convertirse, en un futuro, en ángeles.