Además de ellos, los otros dos grandes protagonistas fueron sus dos hijos, Milan y Sasha, que lucían camisetas amarillas miraban atónitos para todos los lados sin entender muy bien por qué había tantos focos y tantos micrófonos. Eso sí, parece que el hijo mayor de la pareja ya se va acostumbrando a ser el centro de atención y cuando su madre le preguntó cómo estaba, contestó emocionado: "Estoy super contento".