Si en algo insisten los nutricionistas es la importancia de consumir alimentos de temporada. Son más fáciles de encontrar, generalmente más baratos y aportan el máximo de nutrientes. Y, sin duda, el otoño es tiempo de castañas. Si alguien lo sabe es Cristina Pedroche, que, como ha confesado en alguna ocasión, adora este fruto y ya ha dado el pistoletazo de salida a la temporada. La presentadora, que hace poco desvelaba cuál era su truco contra sus antojos de dulce, compartía una imagen en sus redes sociales en la que podemos ver una chimenea encendida con este fruto seco junto a la llama, en una situación que ella misma define como "Mi sueño hecho realidad", junto con un icono de un corazón. Y es que se convierten en uno de esos placeres de esta estación y, además, aprovecha los beneficios de este alimento.
Así, la experta en belleza Carmen Navarro recomienda recurrir a este aliado dentro de nuestro plan anticelulitis en invierno. ¿La razón? Es un alimento rico en potasio. Tal vez el más conocido es el plátano, pero también los frutos secos y, en esta temporada, una de las estrellas es la castaña, tan unida a los meses de frío. Además, destaca otra de sus características estrella: aporta pocas grasas, además de ser uno de los frutos secos con menos calorías (unas 190 por cada 100 gramos de producto), por lo que se convierte en un buen aliado como tentempié. A eso hay que sumar que tienen un alto aporte de fibra, vitaminas y minerales, por ejemplo, zinc, que ayuda a tener un pelo más fuerte. No es extraño que estemos ante una de las pasiones gastro de la presentadora. "Ni chocolate, ni galletas, ni nada… ¡mi vicio son las castañas! ¡Las quiero todas! Me gustan de cualquier forma, aunque mis favoritas son crudas y asadas. Me las como casi con ansia, ¡hasta que no se acaban no paro!”, ha apuntado en alguna ocasión Cristina Pedroche sobre estos frutos tan típicos del otoño, que se convierten en la base de numerosas recetas.
La castaña también se utiliza en tratamientos de belleza, como el que proponen en el Balneario de Mondariz (Pontevedra) por su eficacia contra la grasa que se acumula en zonas complicadas como las piernas, el abdomen o los glúteos, originando la flacidez de la piel y los característicos hoyuelos de la celulitis. Y es que la composición de la castaña, a base de glúcidos, proteínas, vitaminas y sales minerales, la convierten en un buen aliado para el tratamiento de la piel, tanto en su función protectora, como suavizante.