Cindy Crawford es una de las supermodelos originales junto a Claudia, Naomi y las demás integrantes del dream team de la década de los noventa. El maquillaje que se llevaba en la época poco tenía que ver con el look por el que apuesta ahora Crawford, lo que triunfaba entonces eran las pieles de acabado mate, el maquillaje de ojos muy marcado y los labios perfilados de un marrón varios tonos más oscuro que el tono natural de la boca. Como demuestra su último ‘selfie’, ahora apuesta por un aspecto ultranatural que poco tiene que ver con las tendencias de la época, sin embargo, ha conservado un gesto de belleza con un gran poder transformador. Gracias a este truco se pueden disimular los párpados caídos e incluso imitar un ‘efecto lifting’ por unas horas.
En la última publicación que el maquillador de Cindy ha subido a su perfil virtual se nota que la supermodelo ha dejado atrás las tendencias de la década que la hizo brillar, sin embargo, existe un gesto de belleza que lleva casi 30 años repitiendo. La top aplica un poco de iluminador justo debajo del arco de la ceja, en el punto más alto de la curva. Los colores claros atraen la atención y destacan el lugar en el que se colocan, al aplicarlo en esta zona se consigue un ‘efecto tensor’ en todo el párpado superior, una mirada más abierta y que la curva de la ceja parezca más pronunciada. El único detalle que diferencia a esta técnica de su predecesora de los años 90 es el acabado: antes se utilizaban fórmulas mate y ahora se llevan las satinadas, nacaradas e incluso metalizadas.
Un truco que no puede ser más sencillo, apto para principiantes y a la vez transformar por completo la forma del ojo. El maquillador de la supermodelo complementa el gesto con otro toque de luz, esta vez en la esquina del lagrimal para eliminar los signos de cansancio. Un secreto que llevan años utilizando en el backstage de los desfiles o para completar el look de alfombra roja de las actrices de Hollywood y que se puede imitar fácilmente desde casa con iluminadores en diferentes texturas e intensidades.
Con el boom que vive este cosmético, hoy en día se pueden encontrar una gran cantidad de iluminadores en múltiples formatos, pero lo mejor es elegir aquellos que se puedan aplicar con precisión en áreas más pequeñas: como el icónico Touche Éclat de Yves Saint Laurent, ahora disponible en 7 tonos para que todas las mujeres puedan encontrar su color ideal; High Beam de Benefit, que incluye un pincel muy fino que permite una aplicación perfecta; o Vanish Flash Stick de Hourglass, en formato barra y textura ligera para un resultado radiante con el que parece que la luz sale desde dentro.