Hay momentos en la vida en los que las mujeres se muestran más decididas a cambiar de look. Los propios estilistas confirman que hay determinadas ocasiones en las que decidimos visitar a nuestro peluquero de confianza y pedirle que se ponga 'tijeras a la obra'. El paso por el salón de belleza suele ser habitual, por ejemplo, a la vuelta de las vacaciones, tras una ruptura o después de dar el "sí quiero". Pero, además, suele haber otra ocasión en la que muchas mujeres deciden cortar por lo sano: tras convertirse en mamás por primera vez. Pero, como en casi todo en esta vida, la excepción confirma la regla y Meghan Markle acaba de demostrar que no es una madre como las demás, al menos en lo que a su melena se refiere. Y es que si nos fijamos en las últimas apariciones públicas de la duquesa de Sussex, lleva el cabello más largo si cabe, suelto y natural. Todo parece indicar que, por el momento al menos, no ha tomado la decisión de cortar centímetros a su pelo tras el nacimiento del pequeño Archie el pasado mes de mayo.
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Meghan Markle, que no es la primera vez que rompe alguna norma no escrita relacionada con su imagen -recordamos cuando apostó por las uñas negras para acudir a los British Fashion Awards o cómo no renuncia a su comentado e informal moño messy-, parece haber decidido no sumarse a un hábito que es bastante habitual en las mamás primerizas por muchas razones. Tras dar a luz, “el cabello empieza a caerse mucho, es mucho más traumático ver caerse un cabello XL que uno corto. Se duerme peor, se pierde peso... Un cambio de look puede ayudar a sentirse mejor y verse más guapa”, explicaba a FASHION el estilista Eduardo Sánchez, refiriéndose a los motivos que animan a muchas mujeres a restar centímetros a su melena apostando por el corte midi.
La media melena precisamente puede ser considerado el mom hair por excelencia, por su versatilidad, su comodidad y su menor exigencia para mantenerlo -algo importante cuando se cuenta con menos tiempo con la llegada de un bebé-, y que, además, tiene un efecto rejuvenecedor. "Durante el embarazo se altera el ciclo capilar normal y se cae menos pelo, así que en los meses después de dar a luz es habitual que se caiga más del normal (el que no se ha caído durante el parto). Pero no todo el mundo sufre una caída capilar extrema en los meses posteriores al parto. A veces puede ser un proceso paulatino, con lo que Meghan puede mantener todavía el volumen extra. "Caerse se caerá, sí, pero insisto que hay casos en los que no es tan fuerte la caída. Aun así, no se puede descartar que lleve extensiones, pocas y bien colocadas, que le confieran ese volumen adicional", contaba la peluquera Diana Daureo sobre el cabello de la duquesa de Sussex.
Y es que aunque todo parecen ser ventajas, lo cierto es que Meghan Markle sigue demostrando que es fiel a su estilo, y no ha querido renunciar a su larga melena morena, llena de fuerza, y que ha convertido en uno de sus rasgos de identidad, tal y como hemos podido comprobar en su aparición en la final femenina del US Open de tenis, donde acudió a ver jugar a su amiga Serena Williams, como durante el lanzamiento de su colección de moda Smart Works en Londres, donde llamó la atención su cabellera ligeramente ondulada y movimiento por debajo de la línea del pecho.