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No solo las mujeres cuidan su pelo. Cada vez más hombres se preocupan por la belleza (y la salud) de su cabello, y las firmas lo saben. Si no, que se lo digan a Mario Vaquerizo, que ha hecho de su larga melena una de sus señas de identidad. Tanto, que acabamos de conocer que su nuevo gran proyecto profesional lo vincula directamente con el mundo de la belleza. ¿El motivo? Convertirse en el primer embajador masculino de la firma Pantene. El conocido artista, que se caracteriza por su espontaneidad y simpatía natural, no ha dudado en transformar su melena para mostrar su mejor versión, tal y como podemos ver en las imágenes de la campaña. Aunque 2019 no empezaba demasiado bien para él, debido a los problemas de salud relacionados con su espalda que ha padecido y que le han mantenido alejado de los focos durante un tiempo, poco a poco, todo parece volver a la normalidad para él y se embarca ahora en este proyecto que le hace seguir los pasos de Paula Echevarría, la 'chica Pantene' a lo largo de los últimos años.
Y es que uno de los rasgos más reconocibles del marido de Alaska es su larga melena, tal y como él mismo explica. "Ser el primer embajador masculino de Pantene para mí supone un ejercicio de auto reafirmación, ya que siempre he defendido que a los hombres también nos gusta cuidar nuestro pelo. Más en mi caso, considero que mi larga melena me imprime carácter y personalidad y llegar a ser el hombre que siempre quise ser. De pequeño siempre quise tener el pelo largo, como muchos de mis ídolos que van desde Joe Dallesandro a Tommy Lee y es por ello por lo que luzco muy orgulloso mi melena al viento, no solo en los conciertos sino también en mi día a día. A mi chica le encanta”, ha declarado el ante su nuevo reto.
El conocido manager y cantante se une, así, a una de las embajadoras más emblemáticas de la firma, Paula Echevarría, pero también a sus nuevas musas, Ángela Molina, María Castro, Miriam Giovanelli y Berta Vázquez, actrices que se han sumado a la intérprete de Velvet con un objetivo claro: representar la diversidad capilar que hay en España. Y los chicos también tenían que tener su hueco.
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