Cualquier información acerca de lo que hace Jennifer Aniston para mantenerse en forma llena titulares. La razón es visible: a sus 49 años la actriz mantiene un físico espectacular. Algunos ejemplos anteriores han sido el ejercicio con una banda elástica que realiza para tonificar sus brazos o la rutina que sigue a diario y que incluye meditación y spin-yoga, una disciplina que mezcla yoga y spinning para ejercitar mente y cuerpo al mismo tiempo. Sin embargo, aunque este ritual diario esté ya más que establecido en su día a día, la actriz confesaba recientemente que otro deporte la ha conquistado: el boxeo, una disciplina que también apasiona a las hermanas Hadid o a Elsa Pataky y que, igual que el yoga, también beneficia por dentro y por fuera.
“El año pasado descubrí el boxeo y me encanta”, admitía la celebrity en una entrevista que recoge el portal Popsugar en la que también aseguraba que es “el entrenamiento con el que he sido constante durante más tiempo además del yoga”. Aunque parezcan disciplinas muy diferentes, ambas tienen en común su capacidad para trabajar cuerpo y mente, aunque en el boxeo la implicación de la segunda no parezca tan clara a priori: “Existe un aspecto mental en el boxeo, durante el ejercicio tu mente tiene que trabajar, no estás simplemente sentada en una bicicleta. ¡Es espectacular!”, explicaba la actriz. Lo cierto es que además de fortalecer los músculos (sobre todo los de los brazos y el core) y quemar hasta 600 calorías por sesión, la práctica del boxeo también ayuda a mejorar la estabilidad, la flexibilidad, la coordinación y el equilibrio, entre otros.
Como señalaba la actriz, al tener que estar muy atenta a los movimientos, que no resultan tan mecánicos como en otros deportes, te mantienes presente en el ahora durante el tiempo que dura el entrenamiento y desconectas de los problemas del día a día. “Consigues un descanso mental de todas las tonterías que tienes que ver y escuchar a diario y disfrutar de pequeños momentos de fantasía en los que te imaginas a quién estás golpeando”, confiesa Jennifer. Al golpear al saco, liberas el estrés, te pones en forma y aprendes a defenderte; un trío casi mágico que termina repercutiendo positivamente en la autoestima y que explica por qué tantas celebrities están apostando por esta forma de entrenar.