Ya se le puede considerar una celebrity por sí misma ya que la peluquera de Kendall Jenner, su hermana Kylie, Jessica Alba o Jennifer Lopez, entre otras, concede entrevistas y posa para los fotógrafos al igual que su reconocida clientela. Las melenas que pasan por su peine son algunas de las más envidiadas del mundo y su experiencia en el mundo de la peluquería le llevó a lanzar su propia marca de cuidado en 2016, OUAI, que nació para simplificar la rutina de cuidado y styling capilar de la mujer sin renunciar a lucir un pelo espectacular. Recientemente, la estilista ha revelado a una conocida publicación estadounidense cuál es el secreto de un cabello libre de grasa: utilizar dos champús en lugar de uno a la hora de lavarlo.
Sufrir de un cuero cabelludo graso no significa forzosamente que los largos gocen de esta condición, de hecho, es habitual que los folículos de las raíces secreten exceso de sebo y que las puntas muestren un aspecto seco, fino, falto de nutrición. Según Jen Atkin, el secreto para no privar de brillo y elasticidad a estas últimas al lavarse el pelo con champús purificantes - formulados para contrarrestar la grasa en el cuero cabelludo - consiste en elegir un segundo nutritivo exclusivamente para los largos.
“Normalmente las puntas han sido teñidas y están bastante castigadas, por lo que hay que lavarlas con un champú hidratante”, comenta Atkin a la citada publicación. La rutina que recomienda seguir para poner en práctica esta nueva versión del doble lavado consiste en lavar primero las raíces con el champú purificante: se debe aplicar el producto sobre las palmas de las manos, emulsionarlo entre ellas y, después, masajear las raíces con suaves movimientos circulares. Para terminar, se aplica el hidratante/nutritivo de medios a puntas con la misma técnica, sin realizar gestos bruscos porque es esta parte del pelo la que sufre más roturas. ¿Sugerencias? Combinar el Champú Purificante, de Pantene, con el Champú Nutritivo Reparador con Oliva & Miel, de Apivita.