"El deporte lo tengo últimamente olvidado porque no tengo tiempo, pero yo siempre digo que a mí me encanta comer y me gusta hacer deporte. Esa delgadez puede ser que como no he podido ni hacer deporte, pues incluso pierdes músculo". Estas eran las palabras de Amaia Salamanca el pasado verano, respondiendo a los comentarios que había recibido sobre su físico.
La actriz española, que tiene tres hijos, Olivia, de tres años, Nacho, de dos, y Mateo, de uno, fruto de su relación con Rosauro Varo, hablaba de lo complicado que estaba siendo para ella retomar su rutina de ejercicios, sin embargo, tal y como ha compartido en sus redes sociales, ya ha vuelto a ponerse manos a la obra y a demostrar por qué es una de nuestras fit moms favoritas.
"Por fin vuelvo a tener algo de tiempo para entrenar y poder muscular!! Aquí os dejo un trocito de mi sesión exprés del otro día", ha escrito Amaia en su perfil personal, donde nos ha descubierto los 'secretos' de su entrenamiento en el gimnasio: "Pierna, core y activación de glúteo!! 4 x (Sentadilla búlgara + Plancha en fitball + Abducción de cadera con miniband en cuadrupedia, vamos, el clásico perrito) 4x (Caída nórdica + Plancha lateral con elevación y descenso de cadera + Monster walks o desplazamientos laterales con miniband en rodillas y tobillos => Éste no lo grabamos 😒, queda pendiente para la próxima sesión".
- Amaia Salamanca, despedida festiva antes de cruzar el charco
- ¿Estaría dispuesta a dejar su carrera por amor? Amaia Salamanca lo tiene muy claro
La protagonista de la serie de televisión Tiempos de guerra no está sola, sino que cuenta con la ayuda de un entrenador personal, Álvaro Yáñez, que la está ayudando a decir adiós a la pereza y volver a coger con ganas sus entrenamientos para recuperar su tonificada figura. Tal y como ha compartido en sus redes, vemos que las zonas de su cuerpo en las que más se está enfocando son las piernas, los glúteos y el core (que no son los abdominales, sino el área que engloba toda la región abdominal y parte baja de la espalda). Copia su rutina ¡y presume de tipazo!