Si el contouring se ha hecho un hueco en el mundo del maquillaje, también en cuestión de coloración capilar se ha ido introduciendo poco a poco una técnica similar para dar volumen y crear contrastes en nuestra melena, armonizándola con nuestras facciones. Los expertos en peluquería llevan años utilizando este procedimiento que consiste en “jugar con los tonos y con los efectos de la luz para conseguir crear contrastes”, tal y como nos comenta María Baras, de Cheska.
Ian Michael Black, director artístico de Aveda y especialista en coloración, hablaba en una entrevista en el blog de la firma del eclipting, una técnica que ayuda a los peluqueros a enmarcar el rostro, utilizando colores contrastados que, eso sí, difieren de una persona a otra, en función de sus facciones y de sus rasgos. ¿Qué se consigue? Resaltar un determinado rasgo, afinar el rostro... Mientras el balayage está destinado a parecer más natural y sutil, en el eclipting se trata de conseguir un contraste mayor. Daba también su pequeño truco para conseguir un rostro más delgado gracias a esta técnica. “Si quiero hacer que la cara se vea más delgada, podría extender las zonas más oscuras hacia los lados", para intentar hacer más fina la zona de las mejillas.
La clave es buscar la armonía del rostro
Al final, de lo que se trata es de aplicar lo que muchos han bautizado como hair contouring, que tal y como nos explica Daniele Sigigliano, director creativo de Blow Dry Bar, se aplica con pincel a mano alzada con la ayuda de una paleta, de la misma forma que lo hacen los pintores. Se resaltan los contornos del cabello, jugando hasta con cuatro colores diferentes a la base natural del pelo, creando luces y sombras en armonía con el rostro. Se trata de jugar con las tonalidades del pelo en función de la forma de nuestro rostro para que éste se vea estilizado y proporcionado. Sigigliano nos explica además que su éxito radica, dependiendo de la forma de la cara o del tipo del cuerpo del pelo, en centrar o disminuir volúmenes para enfatizar los puntos donde queremos desviar la atención del ojo de quien nos mira.
¿Qué tonos debes combinar?
Sobre los rostros más redondos, David Lesur, del Instituto de Belleza David Künzle en Madrid, sugiere aclarar primero las raíces para así atraer la luz y el brillo de esa zona, “oscureciendo sutilmente medios y puntas, un contraste que se produce a la altura del oído para enmarcar el rostro”. Y es que para rostros redondos u ovalados, esta técnica es muy atractiva, según Daniele Sigigliano, sobre todo jugando con los tonos más claros. "El juego de sombras oscuras y claras colocadas estratégicamente ayuda a disimular los rostros más redondos", nos cuenta Daniela Llorente, colorista de Maison Eduardo Sánchez.
En cambio para rostros alargados, trataremos de disminuir la apariencia de longitud excesiva utilizando los colores más oscuros en la raíz, aclarando, poco a poco, el tono hasta llegar a las puntas. Mientras, para caras en forma de corazón el objetivo es dar apariencia de una cara ovalada. Se trabaja, dice Sigigliano, dando luz a los mechones que están cerca de la mandíbula y a la altura de las orejas y dejaremos los colores oscuros para los mechones que están cerca de la frente.
Por último, para los rostros cuadrados es una buena opción aclarar la melena en el centro, añade el director creativo de Blow Dry Bar, y jugaremos con capas de color en el resto.