"No sé cómo se llama esta fruta pero no puedo parar de comerla últimamente. Está riquísima", ha confesado Amelia Bono a sus seguidores virtuales en las redes sociales. Así como le ofrecimos los mejores consejos de la entrenadora personal y coach de carrera Andrea de Ayala cuando se inició, con ciertas dudas, en el mundo del running (que ahora le apasiona), también esta vez hemos querido ayudar a la influencer a descubrir no solo cuál es el nombre de este supuesto manjar exótico, sino también a conocer cuáles son sus propiedades y su procedencia.
Déjanos adelantarte que nos ayuda a lucir un rostro radiante. Aunque no hay alimentos milagrosos, sí puede ser interesante incorporar esta fruta (como muchas otras) a nuestra alimentación. Te contamos por qué.
Amelia Bono, adicta a una fruta tropical con infinitas propiedades
La fruta que toma Amelia Bono se llama pitahaya o fruta del dragón. Si eso de "pitahaya" te suena, quizá es porque, antes que Amelia Bono, Cristina Pedroche también la probó. De hecho, su sabor le debió de gustar especialmente porque, por alguna razón, Pitahaya es el apodo que la presentadora de televisión le puso a su primera hija, Laia, que en julio cumplirá dos añitos y en breve tendrá un hermanito.
La pitahaya o dragon fruit procede de América Central y América del Sur. Es originaria de las regiones tropicales y subtropicales de estos continentes. Actualmente, se cultiva en muchas otras partes del mundo debido a su popularidad y beneficios para la salud, incluyendo países de Asia como Tailandia, Vietnam y Malasia.
Según publicaciones del Centro Nacional para la Información Biotecnológica, que es parte de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, una rama de los Institutos Nacionales de Salud (NIH), la pitahaya destaca sobre todo por su poder antioxidante. Nos ayuda a combatir los radicales libres y a presumir de una piel radiante y luminosa. Además, contiene vitaminas del grupo B, que aumentan los niveles de energía. Por si fuera poco, su alto contenido en fibra favorece la salud intestinal, lo que nos ayuda a lucir un vientre plano. Además, es ideal para dietas, ya que es baja en calorías y rica en agua.
Mejor fermentada
Según estudios recientes, de los que el NIH se hace eco también, las propiedades antioxidantes de la fruta del dragón se intensifican cuando esta se fermenta. Generalmente, se utiliza para hacer batidos o smoothies y se combina con otras frutas. Pero si se fermenta (tipo kombucha) también está deliciosa y sus beneficios se incrementan.
La que toma Amelia es amarilla pero la más común (y llamativa) es la de color rosa. Los mercados de fruta local de islas como Hawaii la suelen vender en pequeñas bolsitas de plástico a modo de snack saludable. En otros lugares del mundo como Bali, acostumbran a servirla en bandejas de fruta variadas para desayunar.
Los batidos de dragon fruit también son frecuentes en ambos destinos. Ahora también la tenemos en España y aunque el sabor no es tan intenso como en sus países de origen, merece la pena probarla. Sus semillas y textura te van a recordar a la chirimoya y al pudin de chía y, curiosamente, surten un efecto parecido a nivel del intestino, funcionando como un gel que mejora considerablemente el tránsito intestinal. Estamos convencidas de que, como Amelia, te vas a aficionar.