El maquillaje semipermanente o PMU (Permanent Make Up) es una técnica que consiste en aplicar pigmentos en la piel a través de diminutas agujas para crear un efecto de maquillaje duradero. Si estás leyendo este artículo es porque, o bien te estás planteando hacerte la micropigmentación por primera vez y quieres saber qué puedes esperar de ella en los próximos años, o bien porque ya te la has realizado y consideras que es momento de volver a acudir al salón para hacerte un retoque y que tus cejas, que siguen siendo la zona más demandada, luzcan tan bonitas como el primer día.
A lo largo de este artículo, de la mano de Mónica Aránguez, técnico en micropigmentación y fundadora del centro Mónica Aránguez, te contamos qué aspectos tienes que tener en cuenta para hacerte un retoque y qué ocurre con las sesiones de láser a las que, según los expertos, deberías someterte para que la persona que te trate pueda trabajar sobre un lienzo blanco, que es lo más deseado por muchas razones.
Los mejores consejos para hacerte un retoque de microblading
En primer lugar, preguntada por cada cuánto deberíamos hacernos un retoque de micropigmentación, Mónica nos indica que "uno de los factores que determina el tiempo entre retoques de los tratamientos de micropigmentación es el tipo de piel y la evolución del pigmento en cada caso particular".
"Teóricamente, las pieles secas mantienen el pigmento por más tiempo (2-3 años), mientras que las pieles grasas es posible que requieran retoques más frecuentes (1-2 años), ya que el exceso de sebo puede hacer que se desvanezca más rápidamente", comenta la experta. "No obstante, los retoques son siempre personalizados y los tiempos son muy relativos", agrega.
¿Qué pasa si te tiñes el pelo y quieres cambiar el color de tus cejas?
Por otro lado, le hemos consultado a Mónica qué ocurriría si cambiásemos de color de pelo y, consecuentemente, quisiéramos modificar el color de nuestras cejas: ¿podríamos hacerlo? Te gustará saber que, según la experta, no hay ningún tipo de problema, ya que "los pigmentos pueden modificarse en los retoques de las cejas, pero siempre de manera que el conjunto sea armónico y acorde con los rasgos de cada rostro". "Es importante que en esta modificación se evalúe adecuadamente la piel y el color natural de las cejas", cuenta la experta.
¡Cuidado con el retinol!
El tercer punto que tienes que tener en cuenta respecto a los retoques de microblading es que puedes espaciar unos de otros utilizando correctamente el retinol si es que este (que debería) es uno de los ingredientes estrella de tu rutina de belleza. Mónica nos ha constatado que el empleo de este activo reduce significativamente la duración del "tatuaje".
"El retinol puede acelerar el proceso de renovación celular de la piel, teniendo un impacto directo en que el pigmento se desvanezca más rápido. Por este motivo, es recomendable que si se usa retinol, se evite su aplicación sobre la micropigmentación de cejas para que el tratamiento dure más", asegura la experta. "Para evitar que el retinol afecte al tratamiento, es importante asegurarse de que el producto no se aplica en zonas cercanas a la micropigmentación", agrega.
Así funciona la 'despigmentación láser'
Para Mónica, en general, es recomendable hacerse una despigmentación láser antes de realizarse una nueva micropigmentación para eliminar todo tipo de residuo y conseguir un color bonito de nuevo. Ahora bien, asegura que "el tratamiento láser no es obligatorio entre sesiones de micropigmentación". "Lo recomendaremos únicamente en los casos en los que es necesario corregir alguna irregularidad, tanto en un diseño erróneo o la corrección de un tono inadecuado", nos cuenta.
Además, según la experta, "la micropigmentación no es definitiva, por este motivo si la técnica se ha realizado correctamente y el pigmento permanece bien, se desvanecerá poco a poco con el paso del tiempo, y no será necesario realizar láser". En caso de que sí sea necesario llevarlo a cabo, la técnico nos cuenta que "para la eliminación total del pigmento en la piel de forma general se requieren varias sesiones".
Explica que "el número dependerá de la intensidad del pigmento implantado, del tiempo pasado desde que se realizó el tratamiento, la profundidad de la micropigmentación y de la respuesta de la piel". "Aunque no podemos asegurar un número exacto de sesiones, habitualmente un caso sencillo consta de dos a cuatro sesiones y en casos más complicados supera las seis sesiones", señala Mónica.
De todas formas, si eres candidata a despigmentación con láser, no tienes que preocuparte. Según nos confirma Mónica, el láser no es extremadamente doloroso. "Durante la sesión se notarán unos pinchazos calientes que son muy soportables. Muchos de nuestros clientes nos indican no haber notado nada durante su sesión de despigmentación", indica.
Nos revela que "el láser más utilizado para la eliminación de pigmentos en los tratamientos de micropigmentación es el Q-Switched, que emite pulsos rápidos que hacen explosionar las partículas de pigmento y posterior eliminación del organismo por vías naturales de desecho, sin dañar el tejido circundante de la zona tratada". "Es fundamental respetar los tiempos entre las sesiones de láser para mantener la piel en las mejores condiciones de seguridad", indica también la experta. Concretamente, dice que es recomendable esperar entre cuatro y seis semanas para permitir que la piel se recupere y veamos la respuesta del pigmento adecuadamente.
¿Cómo lucir unas cejas bonitas entre sesiones de despigmentación?
Si te preocupa cómo se verán tus cejas cuando te hayas hecho la primera sesión de láser y hasta que te hagas la segunda (en caso de que sea necesaria), tienes que saber que después del tratamiento láser la piel reacciona durante unas horas mostrándose ligeramente enrojecida, inflamada e irritada. El pelo de las cejas se verá en algunos casos más claro los días posteriores, pero no es definitivo.
Para tener las cejas lo más bonitas posible entre las sesiones de láser y hasta que realicemos nuevamente la micropigmentación, según Mónica, "podemos recurrir a la aplicación de productos cosméticos con color para cejas como geles, sombras o lápices que ayuden a modificar el tono". Otros tratamientos como el laminado, que ópticamente puede conseguir que parezcan más gruesas, no son recomendables después del láser. Hay que dejar un tiempo de margen y es el mismo que el que los expertos recomiendan que pase hasta hacerse la micropigmentación de nuevo. Es muy importante que el tratamiento láser se realice de manera profesional para obtener los mejores resultados manteniendo la salud de la piel.