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La limpieza facial es un pilar fundamental en el cuidado de la piel, pero, ¿la estás haciendo de la forma correcta? Según Esther Moreno, facialista fundadora de EM Studio, muchos cometemos errores cruciales en nuestra rutina de limpieza, ya sea por abusar de ella o por no realizarla adecuadamente. A lo largo de este artículo te desvelamos cuál es la mejor manera de llevarla a cabo para que luzcas una piel limpia, sana y siempre joven. ¡Toma nota!
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¿Qué es hacer doble limpieza facial?
Para Esther Moreno, hacer doble limpieza facial pasa por "comenzar con un limpiador con base lipídica (como aceites, leches o bálsamos) para remover la suciedad y productos de larga duración, seguido de un limpiador con base acuosa (gel, mousse, espumas) para eliminar impurezas y residuos finales". "Esta combinación asegura una piel profundamente limpia y lista para regenerarse durante la noche", comenta la experta. "Por la mañana, basta con el segundo paso de limpieza, la fase acuosa, para refrescar la piel", agrega. Moreno advierte que "lavarse la cara solo con agua no es suficiente; es esencial utilizar un producto de limpieza adecuado para eliminar cualquier residuo nocturno y preparar la piel para el día".
¿Cuántas veces hay que hacer limpieza facial?
La doble limpieza facial, según los expertos, se debe de hacer cada noche. Para Mercedes Marcos, fundadora de QUINQUE, "resulta fundamental implementarla después del verano para reparar la barrera cutánea y restaurar el equilibrio de la piel". "Mantener una función barrera activa y promover una microbiota cutánea equilibrada son esenciales, no solo para proteger la piel de factores externos y mantener su hidratación, si no para que nuestra piel envejezca mejor". Así, recomienda el Dúo Limpieza, que consta de la espuma limpiadora (The Gentle Foam) y la gelatina limpiadora, dos de los best-sellers de la marca.
Doble limpieza facial paso a paso:
La farmacéutica experta en dermocosmética María Olmos, de Youfarma.es, defiende que, "para limpiar bien el rostro lo ideal es optar por la doble limpieza con un primer paso en aceite para eliminar el maquillaje, los restos de crema solar y contaminación. Después, el segundo en gel para retirar los restos de aceite y dejar la piel limpia sin tirantez”, señala experta. El paso a paso perfecto sería.
- Aplicar sobre el rostro un limpiador en aceite realizando suaves masajes circulares.
- Aclarar el rostro.
- Aplicar un limpiador jabonoso.
- Secar el rostro a pequeños toquecitos.
La cosmetóloga Raquel González asegura que una rutina de doble limpieza es imprescindible "para mejorar la permeabilidad de la piel y perfeccionarla al liberarla de impurezas".