La magia de los polinucleótidos: más guapa sin que sepan qué te has hecho

La medicina estética regenerativa ha ganado terreno a la medicina estética convencional. Se ha convertido en tendencia porque, cada vez más, se buscan resultados naturales y progresivos. Se persigue mejorar y no transformar. En este contexto, según la doctora Pérez Sevilla, experta en cirugía estética y medicina estética facial, hay cuatro grandes protagonistas: las células madre, los exosomas, los factores de crecimiento y los polinucleótidos. También los tratamientos con grasa autóloga (del propio paciente) crecen en popularidad. Sin embargo, para la doctora, los polinucleótidos van a ser los reyes de la pista.

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Los protagonistas de la medicina regenerativa

Existen diferencias y semejanzas entre los hasta ahora se han podido considerar los tres tratamientos estrella de la medicina estética regenerativa: 

• Factores de crecimiento: según la doctora Flavia Bonina, médico estético y directora médica de la clínica Doctora Bonina, las define como "proteínas que se encuentran en el plasma sanguíneo". Nos cuenta que regulan la división celular y la supervivencia de la célula y son fundamentales para la regeneración de los tejidos. Desde la firma biotecnológica made in Spain, Mila Bonis, explican que son proteínas, que pueden ser de varios tipos (epidérmico, insulínico, plaquetario…) e intervienen en la regeneración celular y son responsables de estimular el crecimiento, la proliferación y la diferenciación de las células. Su descubrimiento mereció un Premio Nobel de Medicina y se aplicó al tratamiento de heridas y lesiones cutáneas, de hueso y cartílago debido a su notable capacidad regeneradora y cicatrizante. 
• Células madre: según los expertos de  Longevity Hub by Clinique La Prairie Madrid, en los tratamientos con células madre, a través de una pequeña cánula, se realiza una extracción pequeña de tejido adiposo de alguna zona del cuerpo. Una vez obtenido el tejido graso se somete al proceso de obtención de las células madre y finalmente se infiltran, previa anestesia local, esas células madre obtenidas de la grasa del paciente en la zona a tratar. 
• Exosomas: la doctora Pérez Sevilla explica que son pequeñas vesículas extracelulares que participan en la comunicación intercelular favoreciendo la reparación de los tejidos, inhibiendo la hiperpigmentación y actuando como agentes antienvejecimiento. Por su parte, la doctora Bonina, cuenta que actualmente, en medicina estética se están utilizando mucho a nivel tópico para después de procedimientos como láser o microneedeling, para mejorar la producción de colágeno y elastina de forma natural.

Los polinucleótidos (PN) merecen mención aparte. Descubre por qué a continuación. 

Los polinucleótidos vienen pisando fuerte

Los polinucleótidos son estimulantes de colágeno purificados que activan la producción de colágeno y elastina, lo que ayuda a mejorar la elasticidad y firmeza de manera duradera. Croma, como empresa internacional precursora en medicina regenerativa, ya ha lanzado tratamientos con polinucleótidos. La doctora Pérez Sevilla los utiliza en su homónima clínica y también la experta en medicina estética y cirujana capilar Cristina Chacón, que acaba de inaugurar en Madrid un centro que lleva su nombre, confía en su poder para mejorar, sobre todo, la textura y tono de la piel. 

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La doctora Chacón nos ha contado que los polinucleótidos son parte de nuestro ADN pero se degradan con el paso de los años. Lo que la medicina regenerativa ha logrado es replicarlos en el laboratorio. Como nos revela la doctora Pérez Sevilla, se obtienen de las gónadas de la trucha asalmonada, por eso, es posible que hayas escuchado que algunas celebrities que se hacen tratamientos con esperma de salmón. Ahora ya sabes de dónde viene el reclamo. 

Tal es la eficacia de los polinucleótidos que son ya, en medicina regenerativa, como los neuromoduladores en medicina estética. Pero, de ahora en adelante, aún darán más de qué hablar. Y es que la ciencia ha avalado su capacidad para aumentar la vitalidad celular dando un empujón a los fibroblastos, que son las células encargadas de formar tejido conjuntivo. Por eso, la doctora Chacón los define como "los mecánicos de los tejidos" y nos cuenta que son especialmente útiles, por ejemplo, para tratar estrías y cicatrices. Tienen un poder regenerador y bioestimulador. Otros de sus beneficios son:

• Son antiinflamatorios
• Son antioxidantes
• Tienen efecto hidratante
• Mejoran el tono de la piel (porque reestablecen el equilibrio entre nuestros melanocitos o células que dan color a la piel)
• Mejoran los resultados de otros tratamientos con ingredientes como el ácido hialurónico porque, al mejorar la textura de la piel, hacen que todo lo que te apliques surta un efecto más bonito. 

Por todas estas razones y, especialmente por la última, hay que desmentir que la medicina regenerativa es solamente preventiva y no sirve para gente mayor. Todo lo contrario, es coadyuvante en muchos casos. La doctora Sevilla es gráfica al afirmar que "el polinucleótido es el novio perfecto pero tiene también poder por sí mismo".

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¿Qué puedes esperar de un tratamiento con polinucleótidos?

Como te decíamos, los polinucleótidos se pueden usar solos o para completar otro tratamiento. Como nos dice la doctora Chacón, para que sean efectivos siempre hay que infiltrarlos en capa intradérmica y solo se puede encargar de ello un médico. No se aplican de forma tópica pero el protocolo no causa dolor. La sensación es similar a la de una mesoterapia. Como mucho, estos tratamientos pueden causar enrojecimiento leve y, quizá, aunque no es demasiado habitual, hematoma en la zona periocular (patas de gallo, sobre todo). Se puede aplicar una crema anestésica antes del tratamiento pero no suele ser necesario. Dado que lo que hacen es estimular colágeno y elastina, hay que ser pacientes para ver resultados. Se necesitan tres sesiones separadas tres semanas y se podría dar de apoyo alguna más. Sin embargo, los estudios han demostrado que con tres la mejora es bastante evidente.

Según la doctora Pérez Sevilla, tanto los polinucleótidos como el resto de protagonistas de la medicina regenerativa, buscan promover la reparación de la piel desde el interior para obtener resultados más naturales y duraderos. Abordan las causas subyacentes del envejecimiento. Por eso, con los avances en biotecnología, la medicina regenerativa está llamada a convertirse en la solución del futuro, ya que permite una intervención más natural, menos invasiva, más duradera y con menos riesgos en comparación con los enfoques convencionales para una huella estética positiva en línea con el lujo silencioso que se persigue en el universo de la belleza.