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Empezamos el otoño con nuevo mantra: los 50 son los nuevos 40. Puede sonar tópico, pero todo parece encajar cuando damos con esas mujeres que llevan años manteniéndose como nuestros iconos de belleza inquebrantables. No podemos negar que las bondades genéticas tienen mucho que ver, sin embargo, una rutina de buenos hábitos —que cuiden cuerpo y mente— es esencial para poner en marcha esta filosofía. No hay ningún truco, todo reside en la actitud y en el cuidado a una misma. Tal y como nos asegura Maribel Verdú, envejecer es ley de vida, y entender qué nos toca en cada momento vital es esencial para comenzar esta década sintiendo que estamos en nuestro mejor momento. Como icono de belleza, hemos hablado con la actriz para conocer más sobre su filosofía de vida, cómo afronta los cambios que acompañan a la edad, o los hábitos saludables que practica cada día:
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«Saber envejecer sería, para mí, entender lo que toca en cada etapa de la vida»
Hablamos con Maribel Verdú:
El último proyecto en el que te hemos visto ha sido en una serie española muy exitosa. ¿Prefieres las series a las películas? ¿Qué debe tener una para que te enganche?
Lo que prefiero son personajes buenos, bien definidos, coherentes y que me hagan disfrutar; y seguir aprendiendo y creciendo como actriz. Si es para cine o televisión en este momento da igual, porque hay producciones de calidad tanto en uno como en otro. Yo me engancho a las historias bien contadas, con personajes bien construidos y que entretengan.
De todos los papeles que has tenido, ¿hay alguno que te haya gustado especialmente la caracterización? ¿Y qué te haya inspirado a nivel personal?
Sí, y ambos además han sido con el mismo director, Pablo Berger. Han sido las películas Blancanieves y Abracadabra. En ambas, el director me ha transformado mucho desde la caracterización y eso me permitió jugar con la parte física, para componer personajes muy distantes y diferentes. Eso me encanta.
Como actriz, ¿sientes que han evolucionado mucho los cánones de belleza desde que empezaste hasta ahora?
El canon de belleza es una de las cosas que más define a una época, lo que permanece y le da personalidad a cada momento histórico. Me ha tocado vivir un cambio de siglo, así que es evidente que ahora ya no se lleva lo que era atractivo cuando empecé. Pero es que yo también he ido cumpliendo años, y lógicamente he tenido que ir ajustando mi gusto estético y mi imagen, a la edad...
¿Qué implica para ti el hecho de “saber envejecer”?
Saber envejecer es saber vivir, porque es ley de vida ir envejeciendo y cumpliendo años… Así que no hay ningún misterio sobre esa premisa. Otra cosa es la actitud que tiene cada uno frente al hecho de que tu cara y tu cuerpo no serán los mismos con el paso del tiempo. La mía es aceptar lo que toca en cada momento vital, intentando atenuar, sin volverme loca, los cambios que se van produciendo. Saber envejecer sería, para mí, entender lo que toca en cada etapa de la vida.
Se habla mucho de la piel, pero el cabello también dice mucho de una persona. ¿Qué es lo que más te gusta de tu melena?
Sí, estoy de acuerdo en que el pelo dice mucho de cada persona y que por tanto hay que cuidarlo. Tengo una buena melena que trato de proteger y de darle el cuidado y la atención que necesita. Me gusta que tenga brillo, luminosidad y sensación de limpieza y cuidado.
¿Qué crees que les preocupa más a las mujeres sobre su cabello a medida que se acercan a los 50?
Normalmente la caída del pelo o la fragilidad. Con el paso del tiempo, el pelo se vuelve más quebradizo y fino, con menos brillo y va perdiendo pigmentación. Así que hay que atacar todos esos frentes para lucir una buena melena.
Entendemos que, durante este proceso de caracterización de personajes que comentábamos antes, tu pelo también se expone a un mayor desgaste...
Sin duda. Uno de los motivos por lo que me preocupa especialmente el cuidado de mi pelo, es que debido a mi profesión sufre más: tintes, secadores, planchas… Y Olistic Next se ha convertido en el aliado perfecto para sentirme más segura con mi melena y cuidarla como se merece.
Los nutracéuticos bebibles están cada vez más presentes en las rutinas de cuidado capilar, pero todavía resultan novedosos para algunas mujeres que prefieren acudir antes a otras alternativas, como los tintes o los cortes de cabello para verse rejuvenecidas. ¿Qué les dirías para que se animen a probar Olistic Next?
No soy quién para dar consejos, solo puedo hablar desde mi experiencia personal, que ha sido la de experimentar una notable mejoría con Olistic Next, porque nutre el folículo desde el interior, a diferencia de otros productos que tratan el exterior del cuero cabelludo. A mí me ha proporcionado mayor densidad y un pelo más fuerte. Otra ventaja extra es que también fortalece las uñas, así que he conseguido un dos por uno.
Además de Olistic, que ayuda desde dentro, ¿hay algún truco o look para verte pelazo y con el que potencies tu belleza?
Para mí, el mejor truco es sentirse bien con uno mismo, tengas la edad que tengas. Hacer una vida sana con el triplete que no falla: buena alimentación, deporte y buena calidad del sueño. Y como decía al principio de la entrevista, la actitud vital lo es todo.
Ahora, como curiosidad, ¿cuál es el corte de pelo más arriesgado que has llevado?
La vez que me lo corté a lo chico en el año 2000, fue un cambio radical que me apetecía probar. Creo que el corte de pelo, cuando es muy drástico, tiene mucho que ver con estados de ánimo o momentos de tu vida con cambios importantes… Es como querer cambiar las cosas desde ahí, para sentirte de otra forma.
¿Tienes algún proyecto en camino con ganas de que podamos ver?
Sí, he rodado una serie, Cuando nadie nos ve, dirigida por Enrique Urbizu que es un proyectazo. Hemos estado meses viviendo en Morón de la Frontera mientras rodábamos y he sido muy feliz. Es una historia de las que enganchan por las tramas, que te dejan pegada a la televisión, y que es entretenimiento en estado puro, eso que yo te decía antes que debe tener una serie para que me enganche....
Como bien dice Maribel Verdú, la actitud lo es todo, y sentirnos seguras con nosotras mismas depende —en buena parte—, de cómo decidamos afrontar el paso de los años. Sin embargo, hay ciertos productos que pueden ayudarnos a atenuar los signos del envejecimiento. El cabello es de lo primero que muestra señales visibles: caída, menor crecimiento, pérdida de grosor, entradas más marcadas, sequedad, encrespamiento y, por supuesto, canas. Es aquí donde entra Olistic Next, un nutracéutico pensado para mujeres en torno a los 50 años y que Maribel ha incorporado a su rutina para combatir todos estos signos.
¿Lo mejor de todo? Como expertas en belleza, nos gusta que esté formulado por dermatólogos y farmacéuticos, y que todos sus ingredientes son naturales y trabajan en sinergia para aportar longevidad al cabello desde el interior. Y es que, igual que en la piel, el envejecimiento capilar está relacionado con los cambios hormonales, especialmente con la llegada de la menopausia. Es por esto por lo que, incluir en nuestra rutina de cuidados un nutracéutico se puede convertir en el gesto definitivo para detener este envejecimiento. A partir de ahora, sentirnos seguras con nuestro cabello será mucho más sencillo, y no hay mejor prueba de ello que Maribel Verdú.